Algo que sucede en un segundo te puede cambiar la vida. Lo saben bien Noemí Sánchez y Toni Atencia, una pareja que ha vuelto esta semana de vacaciones a la Isla, dos años después de sufrir un accidente en moto en el que pudieron perder la vida. Han vuelto a ese mismo punto de la carretera general, cerca de Alaior. Y allí, abrazados y en silencio, han prometido dejar atrás el pasado y disfrutar de cada segundo de esta nueva oportunidad.
El drama
7 de agosto. Noemí y Toni llegan a la Isla para pasar una semana de vacaciones. Les encanta Menorca desde que la descubrieron en 2021. El plan es que Toni se vaya con una moto que han alquilado hasta el hotel y Noemí tomará un taxi con las maletas. Pero, la compañía aérea las pierde. El plan cambia. «Ya que no tenemos maletas por qué no vamos los dos en la moto hasta Ciutadella, así la conocemos». Mandan un mensaje a sus tres hijos e inician la ruta. A las 9.30, en la carretera general, en el desvío de Alaior, un golpe de viento, confirmado más tarde con los datos de Meteorología, les empuja y provoca que se empotren contra un coche que circula en sentido contrario. No perdieron la conciencia. «Primero pensé que serían cuatro rasguños -explica Noemí-, nos estuvimos llamando...». Tenía seccionadas las arterias aorta y la femoral. Despertó a los tres días en la UCI de Son Espases.
Su marido tardó 15 días en recuperar la conciencia. Toni tenía múltiples traumas, de la cabeza a los pies. Ella perdió la pierna izquierda, amputada desde la cadera. Cuando la operaron en Girona, donde residen, unos días después, le dieron un 5 por ciento de posibilidades de sobrevivir. Allí estuvieron los dos más de un mes y medio y todavía acuden para la rehabilitación. Noemí lleva 13 operaciones, un gran trabajo de los médicos, que han contado con un factor fundamental:«Nunca he dejado de luchar».
De nuevo, de vacaciones
Han vuelto a vivir, pero otra vida distinta. Antes del accidente, tenían una granja con diez caballos, que la pareja cuidaba. Los hijos se encargaron de venderlos. No han recuperado una actividad profesional, porque su misión ahora es recuperarse para vivir cada momento, como hacen en estas vacaciones.
Noemí, junto a Toni, explica, con una enorme sonrisa, el valor que tiene para ellos volver a Menorca, al mismo hotel, para disfrutar de una semana, igual que soñaban hacerlo en agosto de 2023. «Nos estamos quitando una mala espina», dicen. Han venido acompañados de dos de sus hijos y de un hermano con su familia.
Noemí lleva una prótesis biónica que la ayuda a caminar. De todas formas, todavía precisa de una silla de ruedas y su marido de las muletas.
Han visitado Ciutadella, «nos ha encantado», la ciudad a la que no pudieron llegar hace dos años. En el hotel Continental de Punta Prima, se acodaban de ellos. «Emi, la cocinera, se ha puesto supercontenta cuando nos ha visto».
Las vacaciones son un regalo. «Hay momento en que seguimos dándole vueltas a lo que nos pasó, pero tenemos que sacar fuerzas de donde haga falta». Hay que protegerse del riesgo de la depresión. Por eso, «nos dedicamos a cuidarnos». Y a vivir.
PacoMe pregunto porque tu no ves las cosas con "realismo" Alguien debe acordarse del conductor que iba tranquilamente en su coche y de repente se le estampó una moto. Imaginaos que en sentido contrario hubiera ido otra moto... Id a la publicación de hace 2 años "En esta ocasión las dos personas afectadas acababan de llegar a Menorca hacía apenas una hora y se dirigían hacia su apartamento en Ciutadella en una scooter de 125 cc, de alquiler, con dos mochilas y una bolsa. Al parecer una racha de viento superior a los 45 km/h en ese momento influyó para que el conductor perdiera el control e invadiera el carril contrario" ¿Imprudencia al coger una moto con viento y con dos mochilas y una bolsa? El mundo al revés.