Los operarios de la empresa M. Polo han concluido los trabajos para devolver la normalidad al Fonduco del puerto de Maó, que a mediados de septiembre sufrió un desprendimiento que evidenció los problemas de inestabilidad en el acantilado.
Los trabajos han consistido no solo en la retirada de las piedras que cayeron, sino también el desbroce de la vegetación y de las raíces que han crecido en el acantilado y que amenazaban con provocar nuevos desprendimientos. El tráfico se tuvo que cortar, pero ya se ha reanudado.