Un laboratorio farmacéutico lleva meses haciendo una ingente campaña publicitaria de un producto para hombres con michelines. Habría que agradecérselo, porque dobles y dobles páginas de publicidad en un montón de periódicos es un alivio para las alicaídas arcas de los medios. El cosmético promete reducir "la grasa localizada en cuatro semanas mientras duermes". Más o menos lo mismo que ha prometido Zapatero a los españoles con su último e improvisado plan de ajuste. Pero, ¿tenemos un problema de cosmética o de cirugía? En apariencia nunca hemos estado mejor, más sanos y más guapos. La publicidad del cosmético de marras constata lo contrario. Frente a lo que apuntan los torsos de Aznar, de Forlán o de Cristiano Ronaldo, los españoles tienen excesivos michelines y son carne de cañón para comprar lo que les digan. El laboratorio asegura que "la grasa desaparece en cuatro semanas y mientras duermes". La situación económica española no se arregla con cosmética ni en cuatro semanas. La cosmética es lo que ha venido empleando Zapatero desde hace más de dos años, con resultados visibles: el paciente ha ido empeorando y han tenido que venir los médicos de fuera para decirle que no hay dieta posible, que es preciso intervenir. Cuando lo ha hecho, ha vuelto a actuar sobre la parte más débil del cuerpo: pensionistas, sobre todo, y funcionarios, sin casi discriminación.
MADRID, 16 (OTR/PRESS)
Un laboratorio farmacéutico lleva meses haciendo una ingente campaña publicitaria de un producto para hombres con michelines. Habría que agradecérselo, porque dobles y dobles páginas de publicidad en un montón de periódicos es un alivio para las alicaídas arcas de los medios. El cosmético promete reducir "la grasa localizada en cuatro semanas mientras duermes". Más o menos lo mismo que ha prometido Zapatero a los españoles con su último e improvisado plan de ajuste. Pero, ¿tenemos un problema de cosmética o de cirugía?
En apariencia nunca hemos estado mejor, más sanos y más guapos. La publicidad del cosmético de marras constata lo contrario. Frente a lo que apuntan los torsos de Aznar, de Forlán o de Cristiano Ronaldo, los españoles tienen excesivos michelines y son carne de cañón para comprar lo que les digan. El laboratorio asegura que "la grasa desaparece en cuatro semanas y mientras duermes". La situación económica española no se arregla con cosmética ni en cuatro semanas. La cosmética es lo que ha venido empleando Zapatero desde hace más de dos años, con resultados visibles: el paciente ha ido empeorando y han tenido que venir los médicos de fuera para decirle que no hay dieta posible, que es preciso intervenir. Cuando lo ha hecho, ha vuelto a actuar sobre la parte más débil del cuerpo: pensionistas, sobre todo, y funcionarios, sin casi discriminación.
Los ahorros hay que hacerlos por arriba. Reduciendo, entre otras cosas, las ayudas a partidos y sindicatos, apretando el cinturón de las autonomías, evitando la duplicidad de cargos de funciones, reduciendo el derroche, haciendo eficiente la Administración. Congelar las pensiones es un insulto al sentido social que predica el presidente y al mismo sentido común. ¿Por qué castigar a quienes cobran 600, 700 euros y no llegan a final de mes?
Aunque una mayoría de ciudadanos vea bien la rebaja de sueldos de los funcionarios, esta demonización de quienes tienen un puesto de trabajo seguro, es tan injusta como discriminatoria. Entre esos funcionarios hay cientos de miles de profesores excelentes, de médicos competentes y entregados, de policías y guardias civiles responsables, etc., y muchísimos funcionarios de las distintas Administraciones que cumplen excelentemente su trabajo. Muchos cobran poco más de mil euros, que se ganan uno a uno. Cierto que hay otros que no lo hacen, que practican un absentismo intelectual permanente. Y que hay miles de asesores puestos a dedo y con sueldos muy superiores que podrían ser eliminados sin que los ciudadanos lo notáramos. No parece que ellos vayan ser la clave del ahorro ni que se plantee una reforma a fondo de la Administración para adelgazarla y hacerla eficaz ni que se negocie la reforma laboral, financiera o del modelo industrial. ZP Cosmetic no funciona. No se trata de rechazar las medidas. Se trata de que no se condene a pasar hambre a los pensionistas, sobre todo, y a no pocos funcionarios eficientes.
francisco.muro@planalfa.es