La Dirección General de Tráfico divulga en su página web los ámbitos de actuación de los radares de que dispone para controlar el tráfico en toda España. En el caso de Menorca, los dispositivos de captación de velocidad están instalados o se mueven por cinco carreteras de las algo menos de treinta que hay en Menorca.
Por un lado, la carretera general es la vía más controlada por la Dirección General de Tráfico. En la Me-1 se encuentran los cuatro radares fijos que hay en la Isla, dos de ellos en su paso por el municipio de Es Mercadal, con una velocidad máxima autorizada de 50 kilómetros por hora, y otros dos en las inmediaciones del núcleo urbano de Alaior, donde la velocidad máxima asciende hasta los 70 kilómetros por hora. En estos puntos la existencia de estos dispositivos está señalizada.
En cuanto a los radares móviles, estos también pueden operar en la carretera general, aunque en el tramo comprendido, aproximadamente, entre Ferreries y Ciutadella, según la información que aparece en la web oficial de la Dirección General de Tráfico, concretamente entre los kilómetros 29,1 y 42,6.
Otras cuatro carreteras son susceptibles de someterse al control de los radares móviles. Dos de ellas conducen a Fornells, desde Maó (Me-7) y desde Es Mercadal (Me-15), en la práctica totalidad de su extensión. Lo mismo ocurre con las carreteras que llevan a dos importantes núcleos costeros, como son Cap d'Artrutx (Me-24) en Ciutadella y Cala en Porter en Alaior (Me-12).
La Dirección General de Tráfico anunció el lunes una campaña de intensificación de los controles de vigilancia sobre la velocidad durante esta semana en todo el territorio español, con el fin de concienciar a los conductores sobre este factor de riesgo sobre el asfalto. Estiman desde este departamento del Ministerio del Interior que circular a una velocidad adecuada podría evitar una cuarta parte de los fallecidos en accidente de tráfico.