Después de dos años, 2013 y 2014, en que las cifras de suicidios en Menorca se habían disparado, llegando a duplicar las del año 2012, el número de muertes por esta causa se redujo en 2015 a siete, lo que significa regresar a una tasa similar a la nacional y a la balear, que ronda los ocho suicidios por cada cien mil habitantes. Así lo acaba de hacer público el Instituto Balear de Estadística.
Aún así, los números siguen siendo elevados y el reciente anuncio realizado por la presidenta del Govern, Francina Armengol, en el Parlament sobre la creación de un Observatorio contra los suicidios, dentro del Plan Estratégico de Salud Mental, no convence a Montserrat Seijas, la diputada del Grupo Mixto que formuló la pregunta sobre esta problemática.