Las intensas precipitaciones registradas la madrugada de este viernes han provocado el derrumbe de parte del techo del restaurante Cala Blanca, situado en la playa.
Según parece el agua acumulada en el tejado del edificio ha causado que las vigas de una parte del restaurante cediera, y que parte del techo se derrumbara.
Pese a todo ello, el restaurante este viernes ha podido abrir y atender a los clientes con cierta normalidad.
El establecimiento recibirá el próximo lunes la visita del perito para que evalúe los daños y si estos pueden ser cubiertos por el seguro.