La celebración del fin de semana de Halloween se ha visto limitada por el decreto que impide estar en la calle entre las 12 de la noche y las 6 de la mañana. Los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado no han tenido constancia de que hayan ocurrido fiestas concurridas o botellones, como prueba que se hayan aplicado propuestas de sanciones pero ninguna de ellas por este motivo.
En total las actas levantadas han sido 31, entre Policía Local y Policía Nacional, además de una intervención en un chalé de Sa Roca donde la Guardia Civil no encontró ninguna anomalía como para levantar alguna acta sancionadora.
Entre las 31 sanciones propuestas, la mayoría lo han sido por incumplimiento del horario del estado de alarma o por no hacer uso de la mascarilla. En Maó, entre Policía Local y Nacional fueron 16 las sanciones propuestas. Seis jóvenes fueron multados por estar en la calle después de las 12 de la noche del sábado y además, en la mayoría de los casos, los mismos sancionados también lo fueron por no usar la mascarilla.
En Ciutadella la Policía Local levantó cuatro actas, dos por fumar en la vía pública y otras dos por no llevar la mascarilla.
La Policía Local de Alaior sancionó a cinco personas por motivos similares, mientras que la de Es Mercadal levantó seis actas, dos de ellas por incumplir el horario del toque de queda, otras dos por no usar la mascarilla y dos más en un establecimiento del término municipal por tener abierto más allá del horario permitido y porque había clientes en la barra, lo que también prohibe la normativa del decreto.
@Mar73 - Entonces, ¿sabe que hay una pandemia de coronavirus que ha matado a cientos de miles de personas, pero cree que está bien dejar que su preciosa descendencia merodee por las calles hasta casi la medianoche en un grupo grande? Aparte del peligro para la sociedad de propagar la enfermedad, ¿qué bien pueden lograr los jóvenes que merodean hasta la medianoche y más allá? El diablo encuentra trabajo para manos ociosas.