El juicio a prevención a un joven español de 20 años acusado de agresión sexual a una menor que entonces tenía 14 años de edad, en Maó, quedó suspendido este lunes en la sección segunda de la Audiencia Provincial de Palma.
El inculpado niega los hechos presuntamente ocurridos el 5 de agosto de 2021, no se aportaron más pruebas que el testimonio de la menor por lo que la vista oral quedó fijada para el 24 de noviembre de 2024 ya que no hubo conformidad entre las partes.
La Fiscalía y el Consell de Menorca aparecen en la acusación puesto que la menor entonces residía en la Casa de la Infancia como tutelada de la administración.
Aquella noche, al parecer, la adolescente se había fugado del centro de menores con una amiga y ambas fueron a dormir con el novio de esta a una vivienda vacacional de los padres del acusado. Fue allí, en la cama que compartieron los tres, según el escrito de acusación, donde el joven forzó a la menor a mantener relaciones sexuales bajo amenazas de muerte.
La defensa del hombre indica que en el centro de menores los monitores no observaron ninguna conducta extraña en la menor al día siguiente. De hecho no fue hasta días después cuando tuvieron conocimiento de lo que pudo haber sucedido a partir de una comunicación entre ambas sobre infidelidades.
Fue entonces cuando el centro de menores lo denunció ante la Policía y la Fiscalía se hizo cargo de la investigación. A la acusación particular se sumó el Consell.
El Ministerio Público pide una condena de 13 años y seis meses de prisión para el acusado, si es declarado culpable, además de indemnización a la chica de 20.000 euros. En el escrito de acusación se indica que la menor sufrió sintomatología postraumática derivada de los hechos denunciados, y sentimientos de culpa por no haber pedido ayuda, vergüenza e indefensión. El recuerdo de la situación, indica el fiscal, dispara su enfado y se acumula a otros problemas familiares.