La Policía Local de Maó ha montado este viernes el primer control de la campaña de Navidad, impulsada por la Dirección General de Tráfico (DGT) para combatir la conducción bajo los efectos del alcohol y las drogas.
El dispositivo se ha montado en el polígono industrial de Maó, y según informa la policía ha realizado un total de 25 pruebas de alcoholemia y todas han sido negativas. Asimismo, han tramitado una denuncia por conducir con la ITV caducada y otra por no tener el permiso de conducir.
La Policía Local de Maó recuerda que conducir bajo los efectos del alcohol y las drogas «es peligroso e ilegal», y pone en riesgo del conductor y de otras personas.