El primer trimestre del año, por lo general el de menor actividad delictiva debido a la calma por el descenso de la población, se ha saldado en Menorca con un total de 904 delitos denunciados, según los datos que ofrece regularmente el Ministerio del Interior.
El número de denuncias de los primeros tres meses del año es, prácticamente, idéntico al del mismo periodo del año anterior con una mínima variación descendente del 0,8 por ciento. Sin embargo, en ese balance general del arranque de 2024 hay un hecho relevante que supone el notable incremento de la actividad delictiva detectada por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado en el tráfico de drogas, casi el cuádruple de la registrada entonces.
De un año a otro se ha pasado de cinco a 18. Es Maó el municipio donde se ha acentuado esta subida puesto que el año pasado fueron tan solo tres en este primer trimestre, y en el actual han sido 12.
El trabajo policial ha dado sus frutos para abortar la entrada de droga en la Isla con vistas a su distribución a partir de la primavera y la temporada estival cuando crece la llegada de potenciales ‘clientes' de los pequeños traficantes. En enero, por ejemplo, la Policía Nacional desarticuló uno de los puntos de venta más activos de Ciutadella, y en Maó se han practicado varias detenciones por este mismo delito.
La subida del tráfico de drogas en este primer registro del año es el denominador común en el Archipiélago puesto que, en general, han sido el doble de los delitos que se contabilizaron en el ejercicio anterior en este mismo periodo, hasta alcanzar los 133.
Un trimestre más son los delitos denunciados en el ámbito de la ciberdelincuencia los que copan la estadística. En Menorca se han notificado 281, es decir, de nuevo suben un 22,7 por ciento en relación al primer trimestre de 2023. Y en este apartado las infracciones penales más denunciadas han sido las estafas informáticas, con un total de 254 en solo tres meses.
En cuanto a las agresiones sexuales siguen preocupantemente en cifras elevadas aunque sean las mismas que antaño, nueve. De ellas cinco han sido violaciones. La inquietud es elevada si constatamos que en todo el año pasado se denunciaron 11 agresiones sexuales con penetración.
Las variaciones en robos con violencia e intimidación, y con fuerza en domicilios, instalaciones y establecimientos no son significativas de un año a otro, salvo un leve incremento en los cometidos en viviendas, de 23 a 28. Sí destaca el descenso de los hurtos en un 21 por ciento, pasando de 155 a 122 de un año a otro.
&Me recuerda hace unos años en Cala Blanca, ruido en las terrazas hasta las tantas, droga y alcohol... y según voces que oí había entre los clientes representantes de la policía...