Un total de 68 intervenciones directas han realizado los agentes de la prefectura de la Policía Local de Ciutadella en lo que llevamos de verano, contra el consumo del alcohol en la vía pública. La estadística difundida contabiliza el periodo comprendido entre el 1 de junio y el 13 de agosto, es decir, prácticamente dos meses y medio, en los que los agentes han puesto 20 multas por este motivo.
Las elevadas cifras exhiben el propósito del cuerpo policial ciutadellenc para poner coto a la extendida práctica del botellón, presente, por lo general, en todas las zonas de ocio de la Isla, especialmente en los puertos de Maó y Ciutadella, pero también en las urbanizaciones del poniente insular donde se concentran jóvenes y adolescentes, en algunos casos menores de edad.
Durante el mes de junio, los agentes disolvieron 29 prácticas de botellón a otros tantos grupos de personas. La cifra de actuaciones por esta infracción a las ordenanzas municipales se situó en 22 a lo largo del mes de julio, mientras que en los 13 primeros días de agosto, la Policía Local de Ciutadella ya ha acumulado 17 intervenciones exclusivas por este motivo.
Como consecuencia de estas actuaciones, 20 de los infractores resultaron sancionados económicamente. Los agentes, además, se incautaron de las bebidas que consumían los jóvenes.
En los casos en que los reprendidos eran menores de edad, la Policía avisa de inmediato a los padres o tutores legales y puede legar a derivarlos a los Servicios Sociales del Ayuntamiento si detecta conductas de riesgo. De la misma forma, los agentes recuerdan que los padres y tutores de los menores pueden llegar a tener que asumir las responsabilidades económicas y legales.
En definitiva, la Policía Local advierte que el consumo de alcohol en la vía pública al margen de los actos autorizados, como son las fiestas patronales, puede resultar muy caro, tanto a menores de edad como a los adultos.
Cualquier terraza es un botellón eterno y legal para el vecino que lo padece