El pequeño núcleo de Maó se prepara para vivir su fiesta grande, Sant Gaietà, una celebración que arrancó ayer con la lectura del pregón de la mano de una de sus vecinas, Adoración Latorre, Dorita, quien junto con su marido llegó a la Isla hace ya 37 años. Una invitación que la pregonera aceptó con gran honor y oportunidad para compartir con sus vecinos unas historias que se podrían resumir «en lo afortunados que somos por vivir aquí» y «el amor que sentimos por la Isla».
Un periodo el de esas casi cuatro décadas del que Dorita destaca «el afecto que recibimos desde el primer momento» en un pueblo donde nacieron sus dos hijos y donde «nunca nos hemos sentido forasters» . El lugar donde levantaron el agroturismo Llucmaçanes Gran, el primer hotel de la población y que les valió a sus responsables el título de Llucmaçaner de s'any de ediciones atrás.
La pregonera, muy implicada siempre en las actividades vecinales, una comunidad de la que se siente «muy orgullosa», aprovechó la ocasión para lanzar una mensaje y animar a que «la gente joven siga implicándose más, si cabe, en las actividades».
Nombramiento
El pregón dio paso al primer baile de las fiestas con los gegants de Llucmaçanes con la ambientación de la Banda de Música de Maó, la parte con más ritmo de una celebración durante la que también se desveló el nombre de la Llucmaçanera des S'any, que es Nati Mir, elegida este año como la profesora más motivadora.