Mercedes Milà ha encontrado su particular ángel de la guarda después del accidente que le partió la cabeza del húmero y forzó su ingreso en el hospital. La presentadora iba en bicicleta durante sus vacaciones en Francia cuando fue picada por un tábano y acabó cayendo al suelo. Una vez superada la operación se ha puesto en manos del fisioterapeuta Lluís Puig.
Con su ayuda y mucha paciencia afronta su rehabilitación con optimismo con la vista puesta en las fiestas de Maó, el 6 de septiembre, para las que espera llegar a tiempo. «Es de esperar que, poc a poc, como dicen en Menorca para todo, pueda recuperar la vida normal, pueda vivir sin analgésicos cada ocho horas, pueda llevar la moto, conducir mi 4L con ruedas fosforito y, por encima de todo, pueda bañarme en el mar», explica en un mensaje publicado en Instagram donde deja ver la impresionante cicatriz de 20 centímetros que le ha quedado en el hombro.
«Ya llevo 11 días desde que pasé por las manos mágicas del doctor Xavier Mir y su genial equipo», relata Mercedes Milá, «voy progresando y obedezco a lo que me dicen que haga». De su recuperación se encarga Lluís Puig, un fisioterapeuta que lleva 17 años tratando específicamente las lesiones de hombro y con el que ha quedado gratamente sorprendida por su técnica. «Quedan solo dos días para que mi ángel de la guarda me quite los puntos y haga radiografías para comprobar que todo sigue el curso previsto», comenta ilusionada la presentadora.