Sa Costa des Muret, la cerraron hace más de 20 años por un derrumbamiento y en vez de solucionar el problema, es de vergüenza que los responsables miren para otro lado, como son el Consorcio del Acantilado del Puerto de Mahón y el Gobierno Central, a través de Puertos del Estado que gestiona cinco puertos de Baleares, entre los cuales está el de Mahón. Desde hace mucho tiempo venimos denunciando la precaria y peligrosa situación del acantilado del puerto de Mahón, pero muchas reuniones y res de res.
El 30 de Noviembre del pasado año, publicamos en Es Diari un artículo: El Acantilado está enfermo en la UCI, «En el artículo del sábado pasado, recomendábamos a los de Dalt la Sala que es necesario, urgente y prioritario consolidar de una vez por todas el acantilado, o sea, es penyasegat del Puerto de Mahón. El martes día 19, a primera hora estaba Alberto y dos compañeros de la empresa Menorca Vertical, en la calle Pont des Castell, colgados en el acantilado limpiando e inspeccionando su estado... Me comentó que uno de los problemas de desencarnar las piedras era a consecuencia del crecimiento de las raíces de las matas, por lo cual es necesario arrancarlas...Varios desprendimientos en los últimos días han vuelto a evidenciar la falta de seguridad en el acantilado, y han puesto encima de la mesa la necesidad de aumentar las actuaciones preventivas. El consorcio integrado por el Ayuntamiento, el Consell insular y el Govern balear, que debía arreglar el acantilado del puerto de Mahón lleva 15 años inactivo. Falta vergüenza torera…
Es Diari MENORCA, publicaba con fecha 22-11-2024: «Desde la empresa Menorca Vertical, que se ha encargado de retirar las piedras que estos días se han desprendido en la zona del Moll de Ponent del puerto de Mahón, aseguran que es necesario realizar un mayor mantenimiento del acantilado, una labor que consideran que no se está haciendo correctamente». «Desde nuestro punto de vista es necesario repasar todo el acantilado, porque como no se está haciendo un control adecuado, al final pasa lo que pasó el otro día», señala Alberto Moreno, responsable de la empresa de trabajos en altura. Moreno apunta especialmente a la necesidad de revisar el acantilado para retirar las higueras, un tipo de árbol cuyas raíces rompen las piedras y provocan los desprendimientos. Precisamente, esta fue la causa que provocó la caída de las dos rocas que el pasado sábado impactaron en el techo del Cafè Baixamar, y también hizo necesaria una intervención de urgencia el lunes para retirar otro gran pedrusco de 200 kilos que amenazaba con caer en el mismo punto». «Sobre todo, es necesario retirar las plantas leñosas, como las higueras o las matas, que son las que dan más problemas, porque si todo está lleno de hierbas, no se puede saber lo que hay detrás», Desde Menorca Vertical, remarca Moreno. también creen que además de limpiar y revisar todo el acantilado, después un geólogo tendría que analizar el estado de las rocas para determinar dónde sería conveniente instalar mallas de seguridad como las que ya hay en algunos tramos, para lo cual sería necesario hacer venir a una empresa de la Península. Desde la empresa menorquina, también explican que acabaron de limpiar el tramo afectado por los últimos desprendimientos, dejando la zona aclarada, y aseveran que en el acantilado del puerto de Mahón suelen trabajar por encargo de personas particulares.» (sic)
Hace más de un año lo denunciamos, es increíble que Alberto Moreno, un experto en la materia después de sus declaraciones, la clase política no ha movido un dedo en el acantilado.
Diari Menorca 17-11-2024: «Gran parte del acantilado donde se desprendieron las piedras está llena de matas. No se han desbrozado desde hace más de dos décadas, ni tampoco se han realizado nuevas intervenciones para apuntalarlo, indicaban restauradores de la zona.
Hace tres años, el Ayuntamiento aprobó una inversión de 350.999 euros a ejecutar en 2022, dividida en dos partidas, para limpieza y desbroce de todo el acantilado, de levante a poniente. La corporación hizo una modificación de crédito para realizar esta obra tras otro grave desprendimiento de rocas en la Costa de Ronda, pero la obra nunca llegó a ejecutarse. Un informe negativo de la secretaría y de los servicios jurídicos paralizaron esta intervención, al interpretar una cuestión que nunca antes se había considerado». (sic)
Diari Menorca 9-11-2025: «La situación es exactamente la misma que cuando cayó la roca. No han tocado nada, ni piensan tocar nada, afirma José Joaquín Parrado, propietario del Café Baixamar del puerto de Mahón, donde, en noviembre del año pasado, cayeron diversas piedras de gran tamaño desde el acantilado, provocando un boquete en la cubierta del edificio.
Un año después del incidente, los restauradores de la zona lamentan que no se haya hecho nada para asegurar este tramo del acantilado del Moll de Ponent y aseguran que viven con temor a que un suceso similar pueda volver a ocurrir. De hecho, la inestabilidad del acantilado del puerto de Mahón volvió a quedar demostrada recientemente, con un nuevo desprendimiento el pasado mes de septiembre en la zona del Fonduco. El propietario del Café Baixamar considera que a pesar de los contactos que mantuvieron con el Ayuntamiento durante la semana posterior al desprendimiento del año pasado, «el Consistorio se ha desentendido del asunto». «Estamos enfadados, porque como mínimo podían haber mostrado un poco de interés y explicarnos la situación, pero no nos han dicho nada», lamenta. Los restauradores de la zona piden que se instale una malla para prevenir nuevas caídas de rocas, como en otras partes del puerto donde ya se ha colocado una. «Unos metros más allá, a la altura de Sa Tintina, hay una red instalada en un pequeño tramo, y lo que no entendemos es por qué no se colocó hasta aquí», se pregunta Parrado.
También se muestra preocupado por la falta de acción del Ayuntamiento Max Gonzalvo, propietario del restaurante Arjau. «Yo estuve en la reunión poco después de que cayeran las rocas y nos dijeron que pasaría un dron con láser para inspeccionar el estado del acantilado, pero no hemos vuelto a saber nada más», asegura. Gonzalvo está convencido de que el mantenimiento de la pared del despeñadero es responsabilidad del Consistorio y no de los particulares, y critica que, un año después, no se haya avanzado en la mejora de la seguridad. «Nos gustaría que estuvieran más al caso, porque es mejor no esperar a que muera alguien», enfatiza. Otros locales de la zona, como la Pizzería Casanova y el restaurante Chef Montes, también expresan su preocupación, especialmente ante la llegada de las lluvias.
Por su parte, desde las empresas que realizan trabajos en altura, aseguran que falta más mantenimiento en el acantilado, y remarcan que en el último año no se ha hecho nada en materia de limpieza y prevención en la parte que corresponde a Mahón.» (sic)
Hasta la fecha los derrumbes han provocado daños materiales, que ya es mucho, vatuadell cent llamps, actúen de urgencia antes de que haya desgracias personales.
Si vivim es penyasegat protegit veurem.
José Barber Allés
Mochilero