Primer día en casa, después de ingreso hospitalario de 15 días, y ya ha habido que llamar al 112, a la Policía Municipal de Alaior, para pedir ayuda. Y dicho sea de paso, en esta ocasión les estoy muy, pero que muy agradecida. Se han portado genial y han sido encantadores.
Sin embargo…..Estoy muy, pero que muy enfadada ( y al decir enfadada, me modero ya que esto quiero hacerlo público y no quiero que me llamen maleducada), muy enfadada con los Servicios Sociales de esta Isla, Menorca y por extensión de este país, España.
Mal vamos, muy mal. Estás toda la vida trabajando, pagando Seguridad Social, Servicios Sociales, Impuestos,,. etc….etc…etc…¿para qué? ¿Para quién?
Paso a exponer el caso:
Llevo 15 años en Menorca, que me encanta y me siento más de aquí que de otro lugar. Desde 2003 estoy trabajando en un departamento de la Consellería de «Bienestar Social y Familia», jajaja.
Resulta que mi nieto iba a hacer la comunión y mi madre, su bisabuela, decide venir para el evento. La mujer tiene ya una edad, voy a buscarla, ella reside en la provincia de Girona, tiene ya, 82 años… y tenemos la mala pata que justo, tres días antes de la comunión, se pone enferma. La madrugada del 12 al 13 de mayo, con 40 de fiebre, hay que llamar a una ambulancia y nos presentamos en urgencias. Una señora de esa edad, con esa fiebre, múltiples patologías, con el corazón delicado, al borde de la muerte. El diagnóstico es una grave y severa infección de orina. Podría reproducir aquí todo el diagnóstico…. largo y complicado, con muchos tecnicismos. La conclusión es esa, una infección de orina, complicada con sus múltiples patologías, su obesidad, (102 kilos) etc…etc…Total, que en los primeros 3, 4 días, se debatió entre la vida y la muerte. Síndrome de desorientación, estar en el hospital, no estar en su entorno habitual, infección, antibióticos para combatir la infección. Todo eso la dejó tocada. Muy tocada. A día de hoy aun lo está y han pasado 15 días.
Ya, la primera en la yugular fue que después de tres días que me pasé en el hospital día y noche, sin dormir, me fui a mi casa a descansar, ya que parecía que ella estaba más tranquila. Trabajo, soy humana, estuve sola esos días. Debido a la desorientación, por lo visto mi madre montó un poco de lio en el hospital a las 5 de la mañana. A mi se me llamó la atención y se me dijo que no podía dejarla sola. Que en el hospìtal hay más gente y no pueden estar todos pendientes de mi madre Olé… A partir de ese día me quedé ininterrumpidamente en el hospital y me di cuenta de que hay unas horas en la noche que las enfermeras y auxiliares, duermen, cuando están cobrando por trabajar ese turno de equis horas, claro…por eso no podía irme a dormir yo a mi casa una noche… porque las enfermeras/os, que cobran por estar trabajando, tienen que dormir, no estar pendientes de los enfermos.
El viernes de la pasada semana voy a hablar con la trabajadora social del Hospital Mateu Orfila, donde estaba ingresada mi madre. Le expongo mi situación, le explico que mi madre no puede valerse por ella misma. Que no tengo quien me ayude, que yo trabajo y mi hija además de tener tres hijos, también trabaja. que no sé como voy a hacer, ya que mi madre tendrá que estar sola mucho tiempo y no ha recuperado su movilidad.
No tenía ni cama para acostarla, ya que no puede dormir tumbada del todo, tiene que estar incorporada. He conseguido alquilar una cama reclinable en Cruz Roja, ¡bien! Un problema menos
Ella, la trabajadora social del Hospital Mateu Orfila, el primer día, el pasado viernes, me habla de un Centro de rehabilitación, Santa Rita, en Ciutadella, que tal vez cabría la posibilidad. Todo lo demás es muy complicado, Residencia, no…no tiene activada la Ley de Dependencia, no es de las Balears.( ¿Pero estamos todos en España o no? ) ¿Centro de día? Uff, tampoco es fácil. Tal vez, ayuda domiciliaria de una hora en Alaior, donde resido desde el 2008. No me ofrece muchas alternativas, Ciutadella es una posibilidad hasta que mi madre recupere su reducida movilidad, insisto…. eso fue el viernes pasado…..pero el lunes, no sé porqué…todo cambió, resulta que mi madre no da el perfil para ingresarla en Santa Rita para que se recupere ya que no tiene heridas que curar y de la ayuda de una hora diaria, para que alguien la atienda también me puedo olvidar, ha hablado con la trabajadora social de Alaior y le ha dicho que no hay disponibilidad, hay unas personas de baja y no tienen personal para más.
Hoy, también, le he expuesto la situación, una vez más, al médico que la atendía, al urólogo, la respuesta ha sido la misma… le damos el alta, después de comer se va para casa, allí ella estará mejor y más orientada. ¡No señor! ¡Ella no se va a su casa! Su casa está a unos cuantos cientos de kilómetros de aquí. Ella hoy por hoy no puede ir a su casa ya que no se puede mover y ¡no puedo llevarla! ¡Y en mi casa va a ser muy, pero que muy complicado atenderla!
Su respuesta, la respuesta de Servicios Sociales ha sido que es mi problema, que me organice con mi hija, que pague a alguien y que cambie turnos de trabajo, incluso me los organizó ella. Y que me busque la vida. Que bien, ¡qué buena asistencia tenemos en este país!
Total, que hoy, día 26 de mayo, me han traído a mi madre a casa, no puede andar, quiere ir al baño y entre mi hija y yo no podemos moverla, ni sostenerla, son más de cien kilos, al levantarla del baño se nos ha caído y no podíamos con ella, hemos tenido que llamar a los municipales (que insisto, han sido encantadores) para que nos ayudaran, ¡no! Para que la levantaran y la llevaran a la cama, que por cierto la hemos tenido que poner en el comedor para que esté más cerca del baño.
Ella, mi madre, una mujer trabajadora, toda su vida cotizando, pagando impuestos. Yo, también, trabajando años y años, pagando impuesto en este país, mis hijos, mi familia, todos…y llega un momento que necesitas ayuda... la pides, lógicamente… y la respuesta es: Ayyy, este es tu problema…. espabila como puedas.