Desde hace semanas, Ciutadella vive una intensa controversia ciudadana en torno a la ocupación de la vía pública, centrada en la ubicación de las terrazas exteriores y en los patios interiores. Son casos diferentes pero ambos exigen acuerdos y decisiones, avaladas por mayorías políticas suficientes, donde se alcance el equilibrio necesario entre las peticiones de los vecinos -que reclaman el derecho al descanso-, las actividades económicas en una ciudad turística, y el ocio en los espacios públicos urbanos.
El Plan Especial del Casco Antiguo de Ciutadella, en vigor desde 1999, no se había aplicado porque se autorizaron las terrazas en patios interiores, a pesar de estar expresamente prohibidas. Las quejas de los ciudadanos motivaron acciones administrativas sancionadoras. La solución pasa por la modificación de este Plan Especial, pero debe hacerse de acuerdo con la ley. De la misma manera, en las terrazas exteriores, corresponde al Ayuntamiento arbitrar y resolver en caso de desacuerdos entre los vecinos y los establecimientos públicos.
Si en otros municipios de Menorca han sido capaces de hallar la solución, Ciutadella también debe aplicarla sin demora.