El puerto de Maó acogerá durante la tercera semana de septiembre el campeonato mundial de veleros en el que participarán trece barcos monocascos de ocho países. Esta regata, que movilizará unas 400 personas, generará un impacto económico que se ha valorado en unos dos millones de euros. Hay de destacar el papel que desempeña el Club Marítimo Mahón al asumir la responsabilidad de la organización y los aspectos técnicos de una competición de esta naturaleza, que exige preparación y experiencia.
Menorca recibió con preocupación la decisión de los armadores de la clase Wally de aplazar la tercera edición de la «Menorca Maxi», prevista para este año, y el anuncio efectuado por los responsables del Trofeo Panerai de Vela Clásica de celebrarlo los años impares.
Los armadores y las tripulaciones de los barcos Wally y J. Class que participaron en las dos primeras ediciones de la «Menorca Maxi» situaron la Isla y el puerto de Maó en el mapa mundial de las competiciones náuticas de élite. La regata Traspac 52 viene a Menorca atraída por el buen trabajo de la regata que impulsó Alberto Palatchi. Ahora hay que saber recuperar la «Menorca Maxi».