Solo el cinco por ciento de las aguas depuradas en la Isla son reutilizadas para riego, de forma que el 95 por ciento de los 7,9 millones de metros cúbicos que llegan al año a las depuradoras menorquinas es vertido directamente al mar; y la generación de electricidad en Menorca a través de energías renovables solo cubre el 2,5 por ciento del consumo. O sea, solo 12.536 megavatios son producidos con instalaciones solares y el parque eólico de Milà, mientras que el 97,5 por ciento (477.635 megavatios) es generado por la central térmica de Endesa de Maó, que el 2019 alcanzó su mayor producción histórica al aumentar el consumo y permanecer Menorca sin la interconexión del cable con Mallorca.
Son dos datos, relevantes y significativos, que acaba de publicar MENORCA• «Es Diari». Evidencian que falta aún mucho por hacer en dos cuestiones de enorme trascendencia para una Isla declarada Reserva de Biosfera: las energías renovables y la gestión de las aguas depuradas, que incluye el antiguo proyecto de la infiltración de Migjorn con agua depurada que aún no se ha empezado.
Son asignaturas pendientes que deben tramitar y solucionar el Consell, el Obsam y el IME.