Cesgarden ha presentado una reclamación ante el Govern porque considera que la zona de Son Bou donde el PTI desplazó las 600 plazas hoteleras a las que tiene derecho se ha convertido en terreno rústico debido a la pasividad de las administraciones y en cumplimiento de las normas del Govern. La promotora mallorquina que ya cobró una indemnización de 28,8 millones del Consell por los efectos de la «operación esponjamiento» del PTI de 2003, aspira ahora a otros 11,4 millones. El Govern considera que no hay base para la reclamación y es evidente que la desestimará, pero esto solo es el paso previo para que se convierta en litigio y lo resuelvan los tribunales.
Los terrenos donde el PTI desplazó las expectativas hoteleras representan dos de las dieciséis Áreas de Reconversión Territorial. Ninguna se ha desarrollado desde el 2003.
Después de las sentencias condenatorias por los cambios en Son Bou es muy importe asegurarse jurídicamente que no hay resquicios en la amalgama de normas urbanísticas que generen más indemnizaciones. Con Cesgarden no se puede pagar dos veces por tropezar en la misma piedra.