La ‘conferencia de presidentes’, celebrada ayer en Santander, se cerró sin resultados o acuerdos importantes. La presidenta de Balears, Marga Prohens, lamentó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, solo hubiera acudido para buscar la foto en lugar de acuerdos puntuales. La voluntad de diálogo entre las partes es relativa, después de que este encuentro de presidentes haya tardado casi tres años en ser convocado por Sánchez.
Prohens detalló los grandes retos que afronta Balears e incidió en el drama de la vivienda, cuyo precio de venta se ha disparado, al igual que los alquileres. Reclamó la cesión de suelo público del Estado para paliar esta problemática, que lastra a muchas familias. También reclamó la presidenta del Govern derogar la Ley de la Vivienda, dar seguridad a los propietarios y defender la propiedad privada ante las ocupaciones y los inquilinos que dejan de pagar el alquiler.
Las reivindicaciones de Balears incluyeron que las Islas queden fuera del reparto de menores migrantes, las dificultades de contratar más sanitarios por el coste del hecho insular, el aumento de pluses y compensaciones económicas para los profesionales que decidan venir a trabajar al Archipiélago, y el rechazo a que Catalunya tenga un sistema fiscal propio. Un conjunto de peticiones de Marga Prohens que quedaron sin respuesta.