El presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, anunció ayer que los extranjeros que cuenten con una vivienda en propiedad solo podrán tener un coche por casa y siempre y cuando paguen el impuesto de circulación en la Isla. Es una de las medidas de la proposición de ley para limitar la entrada de vehículos -restricción que también afectará a los coches de alquiler- cuya redacción se conocerá el 13 de junio para reducir el número de vehículos que llegan a Mallorca y que no tributan en Balears. Estas medidas se empezarán a aplicar en Eivissa a partir del próximo domingo. La limitación de vehículos en Mallorca forma parte de las medidas para limitar el crecimiento de plazas y frenar la masificación turística, que provoca malestar y rechazo social.
Otra de las actuaciones consiste en suprimir el concepto ‘promoción’ en la Fundació Mallorca Turisme para denominarse Fundació Turisme Responsable de Mallorca. El clamor social contra la masificación en Balears es evidente. Las instituciones no pueden demorar las medidas que han de demostrar su eficacia real para responder al que es uno de los primeros problemas de los residentes en las Islas. El turismo no puede tener efectos invasivos ni perjudiciales para los residentes. En Menorca corresponde al Consell liderar y concretar las actuaciones contra la masificación.