La información difundida por el Gobierno tras la reunión que ayer mantuvieron el conseller de Empresa y Energía del Govern, Alejandro Sáenz de San Pedro, y el secretario de Estado de Energía, Joan Groizard, anuncia que «la propuesta inicial de la ‘Planificación de Electricidad con horizonte 2030’ contempla, de partida, actuaciones como la culminación del segundo cable entre la península y Mallorca, y el segundo cable entre Mallorca y Menorca».
Es un planteamiento de larga y compleja tramitación, con plazo de ejecución para los próximos cinco años que motiva distintas valoraciones. Mientras el PSOE «celebra la inversión del Gobierno de España para el segundo cable», el PP denuncia que «el Gobierno aprueba el segundo cable Mallorca-Menorca con cinco años de retraso».
La inclusión de esta infraestructura en el plan 2025-2030 no garantiza su ejecución porque ya aparecía como inversión prioritaria y obligatoria en la planificación de 2015-2020, hace diez años. Tras el gran apagón de 2018, el Gobierno de Pedro Sánchez la excluyó, incomprensiblemente, del programa eléctrico 2021-2026. El Consell y el Govern deben realizar un seguimiento riguroso y constante de los trámites y gestiones para garantizar que el segundo cable anunciado ayer entre en servicio antes de 2030.