Es difícil analizar la mejora de las expectativas económicas cuando se cierra la temporada turística con 6.577 personas en el paro, 968 más que a finales de octubre del año pasado, sin duda el dato más negativo de este balance. La mejora del empleo tardará más que los primeros pasos firmes de recuperación económica. Algunos expertos consideran que la creación de puestos de trabajo no se produce hasta que la economía alcanza un crecimiento del 3 por ciento (PIB) y todavía estamos lejos de ese objetivo (sólo Eivissa lo ha conseguido). De todas formas, la temporada turística ha sido menos mala que la anterior y la de 2001 se prevé que será mejor que la última. Por tanto la tendencia es positiva aunque el pulso en Menorca es más débil que en el resto de las Islas y similar a la media estatal. Hay que pensar que si padecemos las consecuencias de una crisis global, que no provocamos, nos beneficiaremos de los ritmos de la recuperación que se generan fuera de la Isla. Hay procesos en marcha a nivel local, por parte del Consell, que conviene apoyar sin reservas, como es la expansión de las nuevas tecnologías. Los convenios con los touroperadores habrá que analizarlos también desde el punto de vista de su coste económico y de los objetivos concretos para un 2011 mejor.
Editorial
El balance y las perspectivas