Este domingo pasado tuvimos ocasión de visitar de nuevo la Isla del Rey. Los magníficos anfitriones que son los "Amics de s'Illa de l' Hospital" acogen semanalmente a los muchos visitantes que reciben y a quienes, de forma muy amena y amable, al tiempo que muy documentada, les explican la historia y los pormenores de ese islote situado en medio del histórico Puerto de Mahón. En esta ocasión había visitantes de Sant Lluís, integrantes de la colonia británica así como un numeroso grupo de amigos de Ciutadella.
Todos ellos pudieron comprobar el impresionante trabajo que viene desarrollando esta asociación civil que de forma totalmente altruista desarrolla su labor en pro de la recuperación, restauración y rehabilitación de unas edificaciones de tanto significado para nuestra Isla y que habían caído en el más absoluto de los descuidos.
Entre las salas ya restauradas y en el transcurso del recorrido se visita también la Sala dedicada al acorazado "Roma" donde el Sr. Mario, presidente de la asociación italiana en la Isla denominada "Italia Amica", explicó en esta ocasión, y en acertada intervención, las causas por las cuales existía esta sala y dio en la diana al tildar la Isla del Rey como "una isla europea". Efectivamente, las vicisitudes históricas que han "ocurrido" en aquel islote la hacen gozar plenamente de ese carácter europeo.
Desde el desembarco de las tropas aragonesas en 1287 que propició la incorporación de Menorca al mundo europeo-cristiano hasta su conversión en isla hospital para uso de muchas escuadras europeas durante y a partir del siglo XVIII, han sido muchos los hechos históricos que han acaecido en ella.
Fue en 1711 cuando, estando Menorca bajo la primera dominación británica del siglo de Oro, se construyó el edificio base del Hospital Militar por orden del Almirante Jennings, comandante de la escuadra británica en el Mediterráneo. Menorca (y la Isla del Rey ) pasaron en 1756 a manos de los franceses hasta que el Tratado de París en 1763 devolvió la isla a Gran Bretaña.
El general Moystin propició la ampliación del Hospital (una segunda planta) que quedó terminado en 1776. En sus tiempos de máximo esplendor disponía de 1.200 camas (es útil hacer un ejercicio de comparación con las camas sanitarias disponibles hoy, año 2010, en Menorca)
La conquista española (Duque de Crillón) significó importantes cambios en el islote así como la construcción de la capilla católica dedicada a San Carlos Borromeo. La tercera dominación británica comenzó en 1798 y terminó en 1802 con el Tratado de Amiens.
Francia usó el Hospital en 1830 como su principal centro sanitario para el cuidado de las tropas que intervinieron en la conquista de Argel. Más adelante, en 1833, Estados Unidos utilizó las instalaciones para descanso de sus escuadras que custodiaban el comercio americano en el Mediterráneo.
En 1840 y durante cuatro años la isla del Rey fue utilizada también por Francia como depósito de carbón para sus buques del Mediterráneo. Fue en 1888 cuando se descubrió la Basílica paleocristiana que mira a la bocana del puerto de Mahón. Después y durante decenios fue Hospital Militar español hasta que las instalaciones sanitario-militares se trasladaron al nuevo edificio (hoy en lamentable ruina) de la calle Vasallo de Mahón.
En 1974 el Ayuntamiento cedió al Estado la isla con el fin de que se construyese un Parador de Turismo. Pasado el período legal sin que se construyese, la propiedad revirtió al Ayuntamiento que intentó pasarlo al sector privado aceptando la construcción de un hotel de lujo que nunca llegó a ser realidad.
Fue en 2004 cuando un grupo de animosos menorquines bajo el liderazgo del ex capitán general mahonés Luis Alejandre Sintes se constituyeron en Asociación cívica cuyo fin era evitar el deterioro continuado de las construcciones que alberga el histórico islote.
Decíamos al principio que su trabajo es realmente admirable y merece sin duda el reconocimiento de todos lo menorquines. Este martes día 9 de noviembre Iniciativa Cívica Mahonesa (ICM) entidad que también ama las cosas de su tierra, les rendirá un Homenaje en el Teatro principal (20.30 horas) que deberá servir también para recolectar fondos que les permitan continuar con su esforzada labor en pro de la recuperación de nuestra historia. Se merecen que el acto sea un éxito.