Las posidonias, las mal llamadas algas, no aparecen en las postales y en las promociones con las que captamos a nuestros turistas. Y como además molestan y son feas, se quitan. Sin tener que actuar del mismo modo con ellos, que conste que tampoco aparecen en las postales y en los anuncios los siguientes elementos, algunos de los cuales también molestan o son poco estéticos: los bañistas con más que evidente sobrepeso; la señora, rodeada de niños y el abuelo, con bañador negro, gorro estrepitoso y nevera de playa azul con ribete blanco; los jubilados en camiseta "imperio"; los jovenzuelos en edad de merecer que lucen tipo jugando al balompié; el que habla por el móvil a todo volumen; los de las raquetas en la orilla; las medusas; las abejas; las moscas; los días nublados; los refrescos a tres euros; los comercios cerrados un sábado por la tarde; "El Mouldi"; las obras; la fruta demasiado madura; los biquinis urbanos; las vallas repartidas por la ciudad sin motivo aparente; el carrusel de coches intentando aparcar en el puerto de Maó; la plaga de los bolardos; los imbéciles y temerarios "fernandos alonso"; los sucios contenedores de aceite; las noches de bochorno; las climatizaciones abusivas; las fachadas cochambrosas; las barbacoas sonoras del vecino; la programación estival en la tele; la canción del verano. Y hay más.
El apunte
Molestan y son feas
Pep Mir |