El Govern debe conseguir el objetivo de déficit y en este aspecto Balears avanza de forma positiva. Sin embargo, debe cuidar las formas y el fondo en cuestiones que son especialmente sensibles. No debería poner en marcha un concurso para privatizar las Oficinas de Información al Inmigrante en todas las Islas sin informar con detalle antes al Consell, que asume casi la mitad del coste del servicio, 99.000 euros por 108.000 del Govern. Incluso la institución menorquina tiene la previsión presupuestaria para 2013 de consignar la misma cantidad de dinero. Es cierto que han cambiado las necesidades de los inmigrantes, sin embargo sigue siendo un colectivo muy numeroso con demandas específicas que hay que atender. En Menorca el funcionamiento ha sido positivo y no hay motivos para contratar el servicio con una empresa privada. ¿Cuánto se ahorrará la administración con este cambio? Es positivo que Menorca defienda sus propias opciones ante un Govern que en demasiadas ocasiones prescinde del acuerdo con el Consell, que es una institución autonómica, según el Estatut. En este caso hay que esperar un paso atrás por parte de la Conselleria de Antoni Gómez y que ceda al Consell la iniciativa y el dinero para llevarla a cabo.
Editorial
Mantener la OFIM, una buena opción