No me puedo creer que después de dejar a la ciudadanía que gobiernan, escurrida de caudales y desheredada de derechos, que diga ahora el Gobierno que le va a pasar la "garlopa" a la Administración, y que, además, van a practicar el "cainismo" político, la "antropofagia" política, el "canibalismo" político. Bueno, lean ustedes que van a poner orden en el gigantesco desmadre que los políticos han generado en 30 años de democracia, de personal que poco menos que sin beneficio ninguno para el ciudadano, pulula de despacho en despacho, con administraciones que han convertido en verdaderos refugios de políticos venidos a menos. Por cierto, eso de las administraciones por sí mismas, son ya un verdadero alarde de caos organizativo y administrativo. Fíjense: tenemos administraciones locales, administraciones provinciales (Diputaciones), administraciones autonómicas, administración nacional y administración europea. Me imagino, que debe ser un chocolate gigantesco a raíz de la cantidad de loros picando en él. Además tenemos los apéndices: consejos insulares, cabildos, etc. etc.
Entre ellos mismos han creado una tupida red, una verdadera acumulación de cargos políticos, y un "enjambre" de asesores, que no veas que inutilidad la suya a la hora de asesorar, si nos atenemos a recordar al Gobierno de Zapatero y la crisis, que ni siquiera vieron, cuando la crisis ya hacía estragos entre los empresarios, sobre todo pequeños empresarios y los asalariados españoles. Asesores digo, que además y no es tema baladí, no han pasado por el fielato de las urnas. Los eligen a dedo, Dios sabe con qué criterio o qué amiguismo, o qué parentesco, o qué vecindad, sin dar cuenta jamás a la ciudadanía, que es quién al fin y al cabo les paga.
Demasiados ayuntamientos, demasiados alcaldes, demasiados concejales, demasiado personal administrativo, demasiado personal auxiliar. Y aquí también aparecen los asesores, o esos a los que llaman personal de confianza ¡Y qué sueldo los de algunos alcaldes! No se crean que sólo los de las grandes ciudades. Fíjense, tenemos un pueblo en España con unos 1.000 habitantes, cuyo alcalde cobra 50.000 euros; 14 alcaldes cobran más que el propio presidente del Gobierno, empezando por la propia Sra. Botella, Dña. Ana, que cómo quien hereda una finca, heredó la alcaldía madrileña de Gallardón. La susodicha, le cuesta a las arcas públicas, 101.987 euros al año. Me supongo que debe de ser en bruto (dato sacado de internet), cuando al presidente del Gobierno le pagan 78.185 euros. Pero es que incluso hay concejales que ganan más que el presidente. El Vicealcalde de Madrid, cobra 90.915 euros. El presidente de Pleno igual sueldo al anterior. Teniente de alcalde 87.127, al igual que el delegado de Área que cobra lo mismo. Luego no crean que con el sueldo se acaba la cosa ¡Qué va, qué va, qué va! Porqué luego aparece lo del cochazo oficial (algunas han ido con él a la peluquería). Cochazo naturalmente con chófer, prebendas de viajes a cualquier parte del mundo, normalmente con una comitiva detrás; comilonas en los mejores restaurantes; una interminable "mamandurria". Fíjense sólo en el siguiente ejemplo: el Ayuntamiento de Madrid tiene 57 concejales. Cómo les he explicado anteriormente alguno de ellos con cargos generosamente remunerados. Pero sigan ustedes leyendo. Estos 57 concejales, incluida la oposición, todos ellos tienen coche oficial. Imagine lo que ello significa. De momento 107 chóferes, y aquí no hay para ponerse de acuerdo, ni color, ni partido, ni "tu tía". El portavoz de IU, Ángel Pérez dijo que "el coche oficial era necesario para ejercer la oposición".
Mientras tanto, vamos camino a los 6 millones de parados y los que trabajan, en su mayoría son mileuristas, o menos aún. O sea que, como para sentir vergüenza ajena.
Los políticos han llenado a España de administraciones, de gobiernos y ministros y no todos precisamente brillantes. Algunos ocupan cargos de lo que desconocen absolutamente todo. Y no sólo lo anecdótico, como pudiera ser en un ministro del Ejército que no supiera que signos del uniforme distinguen a un teniente de un teniente coronel, o qué diferencia hay entre una escopeta del calibre 12 para cazar conejos o un fusil de asalto G36E o un cetme . Lo peor es que su formación como gestor venga a resultar ser como decía la cartilla militar sobre el valor: se le supone.
Bien, si lo que se rumorea ahora sobre Rajoy y su gobierno se cumple a rajatabla, aunque lamentablemente, ya quedan trastocadas las prioridades. Primero sólo fuera por ejemplo, debió de haber arreglado el gigantesco desbarajuste administrativo y político, y después finalmente, es decir ahora, los asalariados, los que se lo curran sin vinculación de administraciones políticas, que son además, los que pagan sueldos y gastos de lo que ahora dicen que van a arreglar. Pero a mí, eso de que "entre bomberos no vamos a pisarnos la manguera" ¿qué quiere a usted que le diga Sr. Rajoy? Me da que va a ser cómo dice mi vecino "demasiada cazuela para tan poco pollo", usted perdone la forma de señalar. Pero mire, por darle una idea ¿por qué no fulmina usted de un decretazo la inanidad del Senado? Eso para empezar ¿A que no?