El único escaño con que cuenta Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados se ha convertido en oro puro para el archipiélago atlántico.
El apoyo de esta formación política al acuerdo de investidura formalizado por PP-Ciudadanos, al que se ha sumado, hace que alcancen la cifra psicológica de 170 diputados a favor de Mariano Rajoy. Ahora falta por ver si el candidato del Partido Popular y presidente del Gobierno en funciones consigue formar un nuevo Gobierno. Ayer le faltaron seis votos.
En cualquier caso, las reivindicaciones de Canarias configuran los catorce compromisos de la denominada 'agenda canaria', que según la portavoz de Coalición Canaria, Ana Oramas, no tiene fecha de caducidad, como tampoco lo tiene el que firmó con el PSOE hace tres meses.
Esta 'hoja de ruta' incluye la tramitación, por vía de urgencia, del nuevo Estatuto de Autonomía de Canarias, que ya fue aprobado por el parlamento autonómico; en caso de reforma de la Constitución, incluir el reconocimiento de Canarias como región ultraperiférica, como ya hace la Unión Europea, y blindar el Régimen Económico y Fiscal, de manera que los ingresos obtenidos con esta norma no se descontarán en el sistema de financiación autonómica.
Balears cuenta con ocho diputados en el Congreso que deben mostrarse reivindicativos y reclamar una 'agenda balear'. No somos islas ultraperiféricas, pero también somos islas, como Canarias, y soportamos unos costes de insularidad que han de ser compensados por el Gobierno de España y la UE.
La voz de Balears en el Congreso han escucharse con fuerza y claridad través de sus ocho parlamentarios, adscritos al PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos. Ponerse de acuerdo en la 'agenda balear' constituye una cuestión de estado inaplazable.