Ya no les veremos más juntos, parece ser. Este film como «Frente al mar» parecen películas premonitorias de su futuro que ya es presente. Relaciones de pareja en ficción difícil de sobrellevar pero esta vez el final es el más real, su separación. Se ha dicho de todo en el papel cuché, pero lo que más me ha llamado la atención son dos cosas. Primero que «Brad Pitt vuelve al mercado», es decir que ya se le puede hincar el diente. Se le puede pretender. En cambio de ella ni mu se dice. ¿Es que Angelina Jolie no puede estar en el mercado aunque tenga la responsabilidad de criar y educar a sus seis hijos? Y en segundo lugar, y no menos importante, ¿quién piensa en los niños, en su estabilidad emocional? Vale, estoy de acuerdo que no hay que aguantar a la pareja por los hijos. Si se ha roto el amor es mejor separar los caminos para que los hijos, aunque en un principio se lo pasan mal y les afecte, puedan estar en armonía con uno o con otro progenitor. Sé de conocidos que siento que no se quieren porque sus hijos son un reflejo de lo que viven en casa. Son jóvenes decaídos, deprimidos, cabizbajo, ausentes, fríos. Un matrimonio que lo ves que está roto y no se atreven a dar el paso de separar sus caminos, pero lo curioso es que tampoco le dan al coco para avivar la chispa del amor.
Por eso me lastima esta noticia, más cuando habían hecho un hogar de familia numerosa. No sé si intentaron volver a conquistarse, si se pusieron en manos de profesionales para reconducir su unión. No alcanzo a saber de su relación, lo que sí sé es que para que el amor dure hay que dialogar, comunicarse de lo que a uno le gusta o le disgusta. Y hay que sorprenderse o detallarse siempre que se pueda. El amor hay que regarlo todos los días. No exige de regalos materiales, sino de detalles. Un paseo, un «lo siento», un «te recojo del trabajo», un «bailamos las mañanas del domingo», un «hoy te hago el desayuno»... Mil ideas para maravillar a tu pareja y que tus hijos formen parte de esa magia. Acciones que hacen no desenchufarte de tu pareja. Si, los hijos desgastan, pero no a la pareja, hay que buscar momentos para seguir sumando compañerismo. No olvidemos nunca que somos humanos y nos caracterizamos por tener sentimientos, nunca un robot por más que lo humanicemos desarrollará estás conexiones neurológicas. Es lo bello de ser humano, que sentimos y poseemos inteligencia no artificial. Y sumando estas dos palabras sentimiento + inteligencia podemos crear momentos inolvidables, fotográficos para nuestra memoria y corazón y, permanecer unidos. Con esto descrito me es difícil pensar poder separarte, cuando refuerzas los eslabones que una vez te unió a esa persona, y formar una familia.
@supervanfamily