Salió de Sant Lluís Montse Morlá a las diez de la mañana del jueves en dirección a Es Castell conduciendo el «Dacia Logan» color blanco identificado con el nombre y el escudo municipal del ayuntamiento.
La alcaldesa santlluïsera recogió en Es Castell al alcalde Lluís Camps. Después se dirigió a Maó donde se incorporó la alcaldesa Conxa Juanola, y a continuación hicieron parada en Sa Teulera de Alaior donde Coia Sugrañes se subió al coche 'transporte-alcaldes'.
Cuatro primeros ediles en dirección a Ferreries, donde, a las once, debía empezar la reunión mensual de la junta de alcaldes, denominada «Comissió de presidents de corporacions locals de Menorca» al participar la presidenta y la vicepresidenta primera del Consell en su condición de consellera de Cooperación Local.
En el trayecto entre Alaior y Es Mercadal llamaron a Francesc Ametller para comunicar al cuco alcalde que ha logrado exceptuar a Fornells del veto al alquiler turístico en suelo urbano que había una plaza disponible en el «Dacia Logan»: «donde van cuatro alcaldes, caben cinco, Xiscu». Le invitaron a sumarse. Pero advirtió primero Ametller a Lluís Camps que «fes bonda entre tantes dones» y explicó después que iría directamente a Ferreries porque estaba preparando otros jarabes medicinales y pactos rectos para Susana Mora. No lo aludió, pero se estaba refiriendo al voto favorable, en el pleno de Es Mercadal, a la moción presentada por el PP para que el catalán en la sanidad pública de Balears no sea exigido como un requisito, sino que tenga la condición de mérito.
La doctora Antonia Cantallops, concejal portavoz del PP, además de negociar y pactar los presupuestos municipales de Es Mercadal con el pragmático Ametller, también arrancó el apoyo del presidente del PSOE-Menorca a la moción de los populares que insta al Govern a retirar este decreto.
De Can Bernat al hindú
Descubrió el alcalde anfitrión, Josep Carreres, a los otros munícipes en Can Bernat, donde, sin prisas, habían pedido café con leche antes de empezar la reunión.
Pla Terme, Felib, Tetra IB y Orve fueron las primeras cuestiones abordadas. Sesudos temas para iniciados. Después, los refuerzos de las policías locales en las fiestas patronales, apoyos técnicos a los ayuntamientos para los planes de desarrollo turístico, el servicio de matadero con carácter insular y nueva Ley de Contratos.
El debate político arrancó con el alquiler turístico con la prohibición de esta actividad en Menorca. Quien llevó la voz cantante del 'no' a la propuesta-veto del Consell fue la alcaldesa de Alaior.
Coia Sugrañes, con los apoyos de Lluís Camps y Pere Moll, reiteró la petición del PP-Menorca para abrir una nueva ronda de negociaciones que permita alcanzar una solución consensuada.
El acuerdo en Menorca no ha sido posible por el rechazo de los alcaldes de Es Castell, Alaior y Es Migjorn Gran. Pere Moll recibe llamadas de propietarios de viviendas en el núcleo migjorner que le piden explicaciones por la prohibición ¿Por qué en Fornells sí y en Es Migjorn no, le preguntan. Y el alcalde migjorner dice a los afectados que «esto son cosas del Consell, porque a los alcaldes no nos han hecho caso».
El asunto se complica Més cuando el Consell no acepta la petición de Maó y Ciutadella para autorizar el alquiler de viviendas unifamiliares en suelo urbano. A ello se añade el desmarque de Gent per Ciutadella, con un criterio asumido por Podemos-Menorca, a favor de alojar a turistas en las casas hasta sesenta días.
La alcaldesa de Ciutadella agudizó en Ferreries su rictus de seriedad después del pleno extraordinario del martes donde se escenificó la división entre los tres partidos del gobierno municipal.
Es tiempo de rectificaciones en el Govern del Pacte y de ir reculando: empezaron con el decreto de las escoletes ahora el PSOE busca un acuerdo imposible para el decreto del catalán que permita superar la imagen de división ante el anuncio de movilizaciones en contra y el compromiso de convocar elecciones y sobre la mesa, el alquiler turístico, con criterios distintos para cada Isla, lo que implica no contentar a nadie.
Menú y pago a escote
A las 14 horas los alcaldes decidieron ir a almorzar al restaurante hindú «Bhondu», situado en la plaza Jaume II de Ferreries. Escogieron el menú del mediodía, a 8,70 euros por comensal, y como acostumbran, pagaron a escote. A pesar de las diferencias políticas, la relación personal es buena. Por ello no se comprende que cuando una alcaldesa acuda al pleno de otro ayuntamiento no sea saludada por la alcaldesa del municipio. ¿Será que no practica el fair play?
Durante el almuerzo no hubo referencias directas a la encuesta del IBES que abre la puerta a un cambio de gobierno en mayo de 2019, pero todos la llevan anotada en su agenda. Los ocho alcaldes de Menorca afrontan el año político más decisivo. Muchos frentes abiertos, como la gasificación de la Isla, hasta ahora cuestionada por los gobiernos municipales de Ciutadella, Maó y el Consell. Los alcaldes de Alaior y Es Migjorn asistieron al foro celebrado el martes en Ciutadella. Once meses para decantar posiciones y consolidar tendencias. La cuestión es ¿quiénes de los ocho actuales primeros ediles repetirán en las próximas municipales o irán en otras candidaturas? Continuará.
PREGUNTAS DE LA SEMANA
¿Impugnará finalmente UGT los tribunales de selección de personal del Consell que ha calificado de «ilegales»?
¿Cuándo conseguirá reparar el Consell los molinos averiados del parque eólico de Milà?
¿Por qué no tramita el IB-Salut la legalización del helipuerto en el hospital Mateu Orfila?
¿Cuándo volverá a contar con un jefe la agrupación de Protección Civil de Ciutadella?
¿Por qué el Ayuntamiento de Maó cuenta con 69 empleados más que el de Ciutadella teniendo menos población?
¿Evitará Joana Gomila el cierre del Centre de Professors de Menorca en Ciutadella?