Sostiene hoy el ingeniero y expresidente del puerto de Barcelona Joaquim Coello que "la coordinación entre los puertos de Maó y Ciutadella es escasa e insuficiente". Coello fue el moderador de la mesa redonda celebrada el viernes sobre "Port i ciutat", organizada por el Colegio de Arquitectos y el Ateneo. Esta coordinación, que ya fue reclamada en el Foro Isla del Rey celebrado en 2014, debería permitir el control de los precios y la priorización de los tráficos marítimos. Los puertos de Maó y Ciutadella deben ser complementarios, aunque la proximidad geográfica del dique de Son Blanc a Mallorca y la península juega a favor del nuevo puerto construido en la bahía de Ciutadella al reducir trayectos y costes de personal y combustible, tal como señala el presidente de Baleària, Adolfo Utor.
Pero, ¿se reúnen los presidentes de Autoritat Portuària de Balears y de Ports de les Illes Balears (Ministerio de Fomento y Govern de la Comunidad Autónoma respectivamente) para impulsar esta coordinación? Nos referimos a Joan Gual de Torrella y Marc Pons. Fomento y Govern son administraciones diferentes con ámbitos competenciales distintos pero coinciden en la gestión de los dos puertos comerciales de Menorca.
Por su parte, la diputada y exalcaldesa Agueda Reynés advierte que el tráfico de cruceros en Maó se reduce: "pasaremos de las 115 escalas de este año a sólo 56 para el año que viene" y recuerda que "se hizo el dragado, se quitó el tacón y se alargó la línea de atraque con un duque de alba" para recibir más cruceros. Tema de vivo debate porque, tras señalar Joaquim Coello que "la llegada de grandes cruceros comporta inconvenientes", plantea: se ha alejado el tráfico de pasajeros de la ciudad y acercado el de cruceros. ¿No debería hacerse lo contrario? A la espera de respuestas queda por concretar el proyecto de Cala Figuera, la nueva terminal de pasajeros y cómo gestionar el atraque de los cruceros.