Que a menos que luce el sol las históricas calles de Ciutadella vuelven a convertirse en una improvisada pasarela por la que se graban películas, spots de televisión, anuncios o, como ayer domingo, se toman imágenes a bellas modelos con el obelisco de la Plaça des Born y la entrada al casco antiguo como testigos mudos del momento, que algún día también se nos mostrará.
Que el alcalde de Es Mercadal, Francesc Ametller, haya lamentado públicamente no poder presenciar este año las fiestas de Sant Nicolau al hallarse indispuesto en casa por una afección renal.
Que el nuevo conseller de Territori del Govern balear, el ibicenco Joan Boned, visitará esta mañana por primera vez el puerto de Son Blanc de Ciutadella, que depende de su Conselleria.
Que el bajo barítono Simón Orfila celebrara ayer su 39 aniversario en Bruselas, interpretando a Dulcamara en «L'Elisir d'amore», y lo ilustrara en las redes con una foto en el Teatre Principal.