Parece que eso de se acabó el amor en Hollywood se contagia. Esta semana la primavera ha alterado la sangre un poquito más de lo habitual y varias parejas de famosos han decidido poner punto y final a sus relaciones sentimentales, como si de una epidemia se tratara. Atención, porque las rupturas amorosas están de moda.
El primero fue Arnold Schwarzenegger, quien tras un cuarto de siglo de relación con su esposa Maria Shriver, anunciaba su separación a través de un comunicado a principios de esta semana, aunque ambos protagonistas han asegurado que «trabajarán en el futuro de la relación».
*Quiere decir esto que dejan una puerta abierta a una posible reconciliación?. Parece que no, porque la futura ex mujer del actor confesó, poco después de anunciar su divorcio, que la relación estaba rota desde 2009, pero ella quiso darle una segunda oportunidad a su marido.
Según 'TMZ', Maria Shriver quiso separarse de Schwarzenegger hace ya dos años, pero las presiones profesionales y sentimentales hicieron que la periodista recapacitara, puesto que la noticia de una separación, para el partido republicano, hubiese sido todo un escándalo, afectando así al entorno político del entonces gobernador de California.
Leonardo Dicaprio y Lady Gaga se suman a la «moda» de las separaciones
Los siguientes en sumarse a la moda de las rupturas han sido Leonardo DiCaprio y Bar Refaeli, quienes parece que han decidido poner punto y final a lo suyo después de cinco años juntos. Sin embargo, entre ellos también parece que las cosas han acabado bastante bien, de forma amistosa y sin perder el contacto.
La nueva adquisición de esta lista de fracasos primaverales es Lady Gaga. El romance que la artista compartía con Luc Carl se ha venido abajo pese a que hace unos meses era la misma cantante quien planeaba su boda.
La pareja llevaba unida sentimentalmente desde que Gaga aún no era conocida y, teniendo en cuenta los constantes altibajos, la cantante ha afirmado rotundamente en una entrevista con 'The Graham Norton Show': «No, no tengo novio y no he estado saliendo con nadie recientemente».
Finalmente, la no-ruptura que más nos llamaba la atención esta semana era la de Pau Gasol con su novia desde hace años, Silvia López, y que además se convirtió en comidilla de la prensa deportiva estadounidense que achacaba al fracaso sentimental el comportamiento del jugador de baloncesto en la cancha.
Según los rumores, en la ruptura se apuntaba hacia terceras personas, ni más ni menos que Kobe Bryant, compañero de equipo de Gasol en Los Angeles Lakers. Sin embargo, las declaraciones de Pau no se hacían esperar: «Es triste porque si hubiese algo de cierto, lo solucionas, pero cuando son historias inventadas es desagradable».
«No es solo injusto para mí, sino también para mi familia y mi novia. Ella ha recibido acusaciones que son absolutamente falsas», confesaba el jugador en una rueda de prensa. «Siempre va a haber historias, ahora es el momento de superarlas».
«Forma parte de todo esto, lo considere justo o no. Lo que más rabia me da es no haber jugado a tope y no haber podido ayudar a mi equipo a conseguir su objetivo», añadía el pivot admitiendo que su rendimiento en la cancha se ha visto perjudicado por este escandaloso episodio, pero sobre todo, dejando claro que, en esta historia, no hay nada de cierto.