El primer ministro del Reino Unido, David Cameron, y su esposa Samantha se encuentran en Mallorca de vacaciones.
A medida que avanzaba la jornada ayer martes, el comentario en el centro de Pollença no era otro. David Cameron, el primer ministro del Reino Unido, había estado tomando un café por la mañana en la terraza del Club Pollença. Lo hacía acompañado por su esposa Samantha y su familia con quienes pasará una semana de vacaciones en la Isla. Cameron y su familia prepararon las maletas para disfrutar de unos tranquilos días en Mallorca nada más concluir los Juegos Olímpicos.
Llegaron a Palma el lunes en un vuelo de la compañía low cost Ryanair, en el que también viajaba Mel, una de las ex Spice Girls, que actuaron en la clausura de las Olimpiadas.
El político y su mujer tomaron un café, un cortado y una copa de agua pasando totalmente desapercibidos por los parroquianos y quienes pasaban por la terraza.
Las imágenes muestran un cuidado trato y la complicidad de la pareja quien sonríe, sin molestarles el ser fotografiados, lo que hace suponer que el primer ministro posaba para un fotógrafo de su confianza, ya que no hay ninguna dando un paseo o dirigiéndose al coche, mirando las tiendas o de escoltas impidiendo realizar estas fotografías, algo habitual en estos casos.