Existen historias que inspiran, que hacen brotar las palabras de aliento y admiración más sinceras. «Querida Elena, querida amiga. [...] Gracias, no hay palabras para describir tu generosidad, tu coraje, tu bondad, tu luz y tu energía, tus ganas de estar bien pero sobre todo de que los que te rodean lo estén. Que no te gusta nada quejarte ya lo sabemos y que te sonrojas cuando te dicen cosas bonitas también. Así que perdón de antemano. Pero es que es de héroes sonreír cuando el corazón llora. Y ser testigo de la vuelta del brillo de tu sonrisa, el mejor de los regalos». De este modo comienza la emotiva carta que Sara Carbonero le dedica a la joven Elena Huelva, con un sarcoma de Ewing diagnosticado desde los 16 años, que en los últimos cuatro años ha creado una gran comunidad en Instagram donde, con una gran actitud, comparte sus vivencias en torno a su enfermedad.
«Hoy todo me huele a colonia de talco y me sabe a piruletas de corazones. Veo cebras de colores y escucho aplausos de fondo. Gracias por ser inspiración, maestra y faro para todos los que te admiramos, te admiramos y te necesitamos tanto», continúa Carbonero, que esta semana se ha acercado al Hospital Universitario Virgen del Rocío, en Sevilla, para visitar a su joven amiga, que se mostró agradecida con la periodista: «Siempre os he compartido muchos bailes, fotos y cenas muy especiales, pero que estemos juntas en esta habitación me ha llenado un poquito el corazoncito que en estos días estaba un poco más triste que en las otras fotos juntas. Sara, mujer y amiga con coraje, te admiro por muchas cosas, ya lo sabes; pero en estos días que has venido me has cedido un poco de tu 'coraje' y fuerza para continuar, y eso para mí, es de las cosas más bonitas», ha publicado en su cuenta de Instagram Elena, autora del libro Mis ganas ganan. Nadie nos ha prometido un mañana, vive el presente.
Desde su diagnóstico, Elena Huelva, ha hecho partícipes a miles de personas de su caso, compartiendo ciclos de quimioterapia, sesiones de radioterapia, ingresos o transfusiones de sangre, normalizando y dándole visibilidad a la enfermedad. Terminó el tratamiento y consiguió curarse, pero en 2020 sufrió una recaída y tuvo que volver a empezar. Pero sus fuerzas no han menguado y la joven continúa siendo una gran fuente de inspiración para muchos, un ejemplo de fortaleza y superación. «¿Alguna vez has escuchado cómo resuena en tu cabeza la palabra «cáncer»? El cáncer tiene algo curioso y es que todos pensamos que es de los demás. Hasta que te llega a ti, y entonces resuena demasiado fuerte, como un pitido lejano pero incesante, de esos que, una vez empiezan, ya no puedes dejar de oír», narra la introducción del libro de Huelva.
Por último, Elena, cuadra bien ese calendario tuyo porque el 15 de octubre tenemos que ir a ver a Loquillo en Madrid, al Wizink. Y después, a L.A. Enhorabuena por lo conseguido estos días. Se puede. Nunca olvides lo fuerte que eres. Te quiero, pequeña gran mujer valiente. Nos vemos prontito. No te soltamos», concluye la emotiva misiva de Carbonero.