Decenas de personas aguardaban desde las ocho y media de esta mañana a la actriz y empresaria Ana Obregón en la Feria del Libro de Madrid para firmar ejemplares del libro sobre su hijo fallecido y donde ha sido recibida con aplausos y a gritos de «Ana, Ana», multitud de cámaras de televisión, apretujones y codazos. En la última jornada de la feria que se celebra en el Parque del Retiro, Ana Obregón ha llegado pasado el mediodía al espacio habilitado para las firmas que se prevén más multitudinarias, al término del paseo en la que se suceden las casetas de librerías y editoriales.
El sol y el calor que protagoniza esta jornada de domingo en Madrid, y después de haber vivido numerosas jornadas lluviosas en la Feria del Libro, ha congregado a multitud de público haciendo colas para obtener una firma de su escritor o escritora preferida. Pero la que ha centrado la máxima atención de prensa y el público ha sido la de Ana Obregón (Madrid, 1955) con ejemplares de su obra «El chico de las musarañas», en la que cuenta el proceso de la enfermedad de su hijo fallecido, de 27 años, en mayo de 2020 a consecuencia de un cáncer, y después del debate que suscitó el nacimiento, a través de gestación subrogada, de la que es su nieta.
Entre cámaras de televisión, fotógrafos y multitud de personas tomando imágenes con sus móviles, la actriz ha tomado asiento para disponerse a comenzar las firmas, mientras la gente aplaudía. Y sólo ha querido hacer una declaración a los medios de comunicación para pedir que las cámaras dejaran a la gente acercarse para que les firmara su libro y recordar que los beneficios obtenidos por los derechos de autor de esta obra serán donados para la investigación contra el cáncer: «Y eso salva vidas», ha dicho. Aunque también ha asegurado que no se esperaba el recibimiento y la afluencia de público que había para adquirir su libro. Un libro publicado el pasado 19 de abril que Aless Lequio comenzó a escribir y que ella acabó y en el que asegura que le dijo que quería tener hijos aunque muriera, además de contar en detalle el doloroso proceso vivido por la familia desde que a su hijo le diagnosticaron un cáncer.
La publicación llegó después de que a finales de marzo se publicaran unas imágenes de Ana Obregón, de 68 años, saliendo con un bebé en brazos de un hospital de Miami, lo que dio paso a un gran debate político, social y ético debido a que la gestación no es legal en España y a la edad de la actriz, de la que se pensaba que era la madre. Días después, la actriz afirmó que la niña es de su hijo fallecido, Alejandro Lequio García, y, por tanto, ella no es madre de la recién nacida, de nombre Ana Sandra Lequio Obregón, sino su abuela. «Quiero darle la enhorabuena», ha indicado una de las primeras personas que se encontraba en la fila esperando, una mujer llamada Esperanza y que había conseguido uno de los 150 números repartidos por la organización para garantizar que su libro iba a ser firmado por la actriz. Aunque había muchas más en la larga fila que partía de allí y decenas las que continuamente se agolpaban para tomar una foto del momento. «¡Como si fuera la reina de España!», ha comentado una mujer sorprendida por la expectación.