«Quiero ser», el nuevo programa de Sara Carbonero ha sido un fracaso total. Tan sólo dos días después de su estreno, se ha caído de la parrilla de Telecinco. El motivo no es otro que los bajos datos de audiencia que ha cosechado.
La productora Mediaset ha decidido trasladar el espacio a Divinty.
Este espacio había sido anunciado como una de las grandes apuestas televisivas de este verano debido, sobre todo, al regreso de la periodista a televisión tras su salida de la cadena para irse a vivir a Portugal con su marido, el futbolista Iker Casillas.