Jared Leto visitó este miércoles El Hormiguero 3.0 para para presentar su última película: Morbius. El artista compartió con Pablo Motos algunos de sus secretos como actor e incluso confesó que llegó a vivir con toxicómanos para preparar su papel en Requiem por un sueño. «Era una oportunidad para ver de qué estás hecho, meterte hasta el fondo. Los días eran bastante tristes», aseguró. Además, llegó a inyectarse agua para poder entender mejor su modo de vida: «Yo me pinchaba agua…, estaba bien hidratado».
Y es que el intérprete lo da todo en cada uno de sus trabajos y han sido muchos sus cambios de imagen a lo largo de su trayectoria. Por ejemplo Leto recordó cuando tuvo que engordar 30 kilos para meterse en la piel del asesino de John Lennon: «Todas las noches cogía un tarro de helado, lo derretía en el microondas y me lo bebía. Tardé mucho tiempo en conseguirlo. Pero bueno, ya he ganado y perdido peso para otras películas». Y es que para el film Dallas Buyers Club tuvo que hacer todo lo contrario, y quedarse en apenas 50 kilos.
Respecto a su trabajo como Paolo Gucci en La casa Gucci, el también cantante aseguró que su espectacular cambio era el resultado de un largo proceso de producción: «Tardaban seis horas en maquillarme todos los días, fue otra experiencia fantástica». El actor, de 50 años, además confesó a las hormigas qué hace para mantenerse joven, un truco que finalmente no revelaron ni al público ni al presentador. Eso sí el actor ya ha indicado en más de una ocasión que cuida mucho su imagen: opta por una alimentación saludable y sigue una dieta vegana.