La llegada del final del verano marca en España el inicio de una de las temporadas gastronómicas más esperadas por los amantes de los alimentos con propiedades excepcionales. Septiembre trae consigo la breve pero intensa temporada de higos frescos, un superalimento de origen mediterráneo cuyo consumo se concentra prácticamente en este mes debido a su corta estacionalidad.
Este fruto, valorado desde la antigüedad por civilizaciones de Oriente Próximo, se ha posicionado en el panorama nutricional actual como un auténtico tesoro para la salud. Su morfología redondeada u ovalada, con piel que varía entre tonalidades verdes, moradas, negras o azuladas según la variedad, esconde una pulpa carnosa repleta de semillas y un sabor intensamente dulce que conquista paladares desde hace siglos.
Según explica la nutricionista Daniela Medina, los higos representan "una excelente fuente de vitaminas y minerales, especialmente vitamina A, vitamina C, vitamina K, potasio y magnesio". Esta riqueza nutricional, combinada con su contenido en fibra, azúcares naturales y antioxidantes, explica las múltiples propiedades beneficiosas que se le atribuyen y que los convierten en un auténtico superalimento de temporada cada vez más valorado por expertos en nutrición.
Beneficios para la salud que revolucionan el bienestar
El portal especializado en bienestar QueApetito ha detallado en su canal de YouTube algunas de las principales ventajas del consumo de higos que están respaldadas científicamente. Entre ellas destaca su capacidad para favorecer el control del peso, gracias a su efecto saciante y su ligero poder laxante, ambos derivados de su elevado contenido en fibra dietética soluble. Esta característica los convierte en aliados perfectos para quienes buscan gestionar su ingesta calórica de forma natural.
La salud ósea y nerviosa también se beneficia significativamente del consumo de higos. El calcio y el magnesio presentes en su composición contribuyen al mantenimiento del sistema óseo y nervioso en condiciones óptimas. Además, sus azúcares naturales proporcionan un efecto isotónico que incrementa los niveles de energía y mejora el estado anímico, siendo particularmente útiles tras esfuerzos físicos o mentales intensos.
Otro aspecto destacable es su potencial para prevenir la degeneración macular, un trastorno visual común en personas mayores de 60 años. Los estudios sugieren que el consumo regular de higos podría reducir el riesgo de desarrollo de esta condición. Adicionalmente, los carotenoides presentes en estos frutos favorecen la reparación de las mucosas, ayudando a prevenir infecciones y nutriendo los tejidos internos.
La salud cardiovascular también encuentra un aliado en los higos, cuyos ácidos grasos omega 3 y omega 6 pueden contribuir a la reducción de la hipertensión y otros trastornos cardíacos. Para quienes sufren deficiencia de hierro, estos frutos representan una opción natural para prevenir la anemia gracias a su contenido en este mineral esencial para la formación de glóbulos rojos.
Desmitificando el contenido calórico y su versatilidad
Contrariamente a la creencia popular que cataloga a los higos como frutos altamente calóricos, el doctor Fernando Fernández Bueno aclara en el canal Medicina Clara que "100 gramos de higos frescos tienen 65 calorías". Esta cifra desmiente el mito y posiciona a los higos como una opción saludable incluso para dietas de control de peso. El especialista añade que su consumo puede resultar favorable en procesos de pérdida de peso debido precisamente a su capacidad saciante, recomendando: "Si tu objetivo es perder peso y quieres tomar frutos saciantes con hidratos de carbono que sean naturales, el higo en el desayuno es maravilloso".
Es importante distinguir entre los higos frescos y los secos, estos últimos obtenidos mediante un proceso de deshidratación que concentra sus nutrientes y eleva su aporte calórico hasta aproximadamente 250 calorías por cada 100 gramos. Sin embargo, los higos secos ofrecen la ventaja de estar disponibles durante todo el año, mientras que los frescos limitan su temporada principalmente a septiembre en España.
También existe cierta confusión entre higos y brevas. Estas últimas son el primer fruto que produce la higuera a finales de la primavera. Desde el establecimiento especializado Frutas Charito explican que "las brevas tienen una forma más alargada y su piel es más gruesa y rugosa". El color de las brevas oscila entre verde y morado oscuro, con un interior más denso y carnoso que contiene menos semillas que los higos propiamente dichos.
Aplicaciones culinarias que potencian sus propiedades
La versatilidad gastronómica de los higos constituye otro de sus grandes atractivos. Pueden consumirse crudos tras un cuidadoso lavado, cortados por la mitad, convirtiéndose en un snack natural perfecto para cualquier momento del día. Su incorporación a ensaladas aporta un contraste dulce muy apreciado, mientras que su mezcla con yogures o cereales potencia el valor nutricional del desayuno o la merienda.
Las técnicas de cocción como el asado u horneado intensifican su sabor y transforman su textura, ampliando las posibilidades culinarias. Su dulzor natural permite que se integren tanto en platos salados como en postres, demostrando una adaptabilidad poco común en el mundo de las frutas.
Entre las recetas más destacadas que utilizan este fruto se encuentra la tarta de higos, cuya elaboración puede seguirse en el canal de YouTube Cocina con Carmen. Para su preparación se requieren ingredientes básicos como azúcar, agua, zumo de limón, mantequilla y una masa preparada con huevos, azúcar y aceite de oliva o girasol, completada con yogur, harina de trigo, levadura química y canela. Esta receta ejemplifica perfectamente la amplia aplicabilidad de los higos en la repostería casera española.
La temporada 2025 de higos en España promete ser especialmente favorable según los productores, quienes anticipan una cosecha de calidad excepcional debido a las condiciones climatológicas óptimas que se han dado durante los meses previos. Los mercados locales ya comienzan a recibir las primeras partidas de este fruto de temporada tan esperado, marcando así el inicio de unas semanas en las que los higos serán protagonistas en las cocinas españolas.
Expertos en gastronomía recomiendan aprovechar la brevedad de la temporada para disfrutar de los higos frescos en su máximo esplendor, ya sea en preparaciones tradicionales o explorando nuevas combinaciones que realcen sus cualidades organolépticas y nutricionales. Sin duda, septiembre de 2025 se presenta como el momento ideal para redescubrir este superalimento mediterráneo y beneficiarse de todas sus propiedades.
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