El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se mostró esta noche convencido de que el PSOE ganará las elecciones generales el próximo 23 de julio «en votos y en escaños» pero que tendrá que formar gobierno con la líder de Sumar, Yolanda Díaz. Así lo ha manifestado el líder del PSOE en una entrevista en el programa Lo de Évole de la Sexta TV, en la que consideró que «no hay un partido político con una mayoría absoluta garantizada» y que en el caso de la derecha el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, «claramente tendrá que pactar con Abascal y en mi caso, pues tendré que pactar con Yolanda».
Además dijo que la líder de Sumar, «en una fragmentación multipartidista, afortunadamente ha logrado unir todo ese espacio y con un partido que articule todos esos movimientos de izquierdas que hay a la izquierda del Partido Socialista». Durante la entrevista ha defendido sus «rectificaciones o cambios de posición» respecto a varias de sus actuaciones como el indulto a líderes del procés en Cataluña, y ha argumentado que «mentir significa decir algo a sabiendas de que no es verdad con propósito de engañar. Rectificar o cambiar de posición es distinto, y lo he hecho por una causa mayor», como, añadió, la convivencia en Cataluña, «donde estamos mejor».
Ha referido también que no gobierna con Bildu, pero que sí ha llegado a pactar leyes con esa formación política como, añadió, con cualquier otra porque lo fundamental, dijo, «no es con quién sino para qué». El presidente del Gobierno ha criticado, así mismo, «las manipulaciones, mentiras y maldades» de la derecha como la frase «que te vote Txapote» o su uso del Falcon, entre otras. Reconoció «el haber cometido un error en este caso técnico en la ley del sí es sí, que provocó una serie de efectos indeseados y es ver rebajas de penas en agresores sexuales. Para mí este es el mayor error».
Sobre la autonomía del Sáhara y la posición del Gobierno, dijo que «la realidad es que durante 50 años que dura este conflicto no ha habido ningún avance y que, por tanto, si la comunidad internacional, Estados Unidos, los principales países europeos están diciendo que tenemos que encontrar otras vías para resolver este conflicto dentro de Naciones Unidas, dentro de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas con la premisa de que tiene que ser una solución acordada por las partes afectadas del conflicto. Yo creo que España tiene que estar en esa actitud constructiva».
Preguntado por cómo valora a Núñez Feijóo refirió que «pensaba que estaba en frente de alguien moderado, de alguien que quería llegar a acuerdos y que al final se ha vuelto a refugiar en lo de siempre, en lo que dijo Ayuso y en lo que dijo Casado, en el Sanchismo». «Yo creo que no es un proyecto político. Eso es simplemente manipular, mentir y mentir, pues en este caso maldades en contra de tu adversario político, en contra mío, para no hablar de lo que tú propones, ni tampoco para rebatir las cosas que hace este Gobierno». Con todo, Sánchez consideró que Feijóo es «un gran rival» y añadió «un buen líder, espero de la oposición».
Se mostró convencido de que en las elecciones generales se superará el 70 % de participación, defendió la integridad del sistema electoral «frente a las maldades» que lo ponen en duda y consideró que en los barrios populares habrá mayor participación que el 28M. Preguntado por qué cree que en esos barrios populares mucho voto va a Vox, dijo que porque han alimentado la discordia y que el PSOE tiene «que trasladar a aquellos que están tentados en votar a la ultraderecha -que en definitiva son personas que sufren precariedad laboral, devaluación salarial, los problemas del día a día que puede tener un trabajador o trabajadora-, que la solución está en avanzar en esos derechos, no en recortar».
Pedro Sánchez dijo que se «griparían muchas de las políticas de igualdad» si en comunidades autónomas en las que Vox tiene un protagonismo especial se retiraran ayudas para víctimas de violencia machista, que como presidente de Gobierno sólo podrían denunciarlo y que «evidentemente tendríamos un problema; porque habría administraciones que no podrían poner en marcha todas estas políticas en favor de la igualdad». Preguntado por su falta de entrevistas en medios más conservadores y sí a otros afines respondió que no ha parado de trabajar aunque consideró que evaluó mal la «fuerza corrosiva de muchos de estos argumentos que se han ido propagando en estos medios de comunicación».
«Efectivamente -abundó Sánchez- no he sido capaz de evaluar ni medir cuáles son las consecuencias de esta burbuja de Sanchismo o antisanchismo que se ha creado por parte de una serie de intereses» y ahora, dijo, espera tener en esos medios la oportunidad de explicarse «nunca es tarde si la dicha es buena».