El expresidente del Gobierno y presidente de FAES, José María Aznar, ha asegurado que «si la coalición Frankenstein sigue en el Gobierno, el precio que tienen acordado ya es hacer una consulta en Cataluña y hacer una consulta en el País Vasco. Ese es el precio acordado. Este es el precio que van a pagar» y ha animado a «cambiar el narcisismo inútil de Sánchez por la competencia útil de Feijóo».
En este sentido se ha pronunciado este sábado Aznar en Málaga durante un acto de campaña del PP de cara a las elecciones del 23J en el que también ha participado el coordinador general del partido y cabeza de lista al Congreso por la provincia, Elías Bendodo. Aznar ha asegurado que el PP quiere «sustituir la división y la confrontación entre los españoles por la unidad, por la coherencia, por la tolerancia, por buscar espacios en los que pueda haber un diálogo nacional para mejorar las cosas».
Ha dicho que el PP ha defendido y defiende el legado de la Transición, y al respecto ha añadido: «Por eso todas estas leyes que dividen a los españoles en buenos o malos, que hacen apelaciones no a la Transición y su concordia, sino a la Guerra Civil y sus enfrentamientos, tienen que ser derogadas y van a ser derogadas».
El presidente de FAES ha subrayado que «la ley es la garantía de la paz, de la democracia. Fuera de ella y fuera de la aplicación razonable del Estado de Derecho, sólo hay arbitrariedad, sólo hay abuso, sólo hay capricho o sólo hay un narcisismo inútil como ha habido durante estos años». «Nuestra victoria será la victoria de la moderación y que algunos que no se equivoquen. La democracia puede ser una criatura frágil pero no es una criatura débil, y por eso cada vez que las democracias se han tenido que confrontar con los regímenes totalitarios o autoritarios en la historia del mundo siempre hemos ganado», ha dicho.
En cuanto a lo que ha calificado como «regalos para los jóvenes», Aznar ha dicho que «no vale todo» y que «lo mejor que podríamos hacer por los jóvenes españoles es hacer una política seria que reduzca la deuda que tenemos en España. Nos van a dejar un endeudamiento de más del 115% del PIB y eso lo tienen que pagar los jóvenes y lo van a pagar muy caro si no actuamos con contundencia».
Ha criticado que las clases medias sufran la inflación desbocada y que se le apliquen numerosos impuestos; y respecto a la convergencia económica, recordó que España llegó a tener el 103% de la renta media de la UE, «y ahora estamos en el 85. Alguien tendrá que decir por qué».
Para el expresidente del Gobierno, el Gobierno de los últimos años ha sido «una coalición Frankenstein» que ha tenido que pagar como precio «dar un ejercicio de poder desmesurado a minorías radicales extremistas que han intentado imponer normas, que han intentado convertir caprichos de ingeniería social en leyes y lo han hecho en contra de la mayoría social de los españoles».
Ha acusado al Gobierno de ser «el primero en la historia de España en el que se aprueban normas y se aprueban leyes con nombres y apellidos para sacar de la cárcel a personas responsables de haber dado un golpe de Estado contra la Constitución, contra la integridad y contra la justicia».
«Poner nuestra casa en orden es el objetivo fundamental que nos debe guiar en estas elecciones», ha dicho Aznar, que también ha afirmado que «si la coalición Frankenstein sigue en el Gobierno, el precio que tienen acordado ya, es hacer una consulta en Cataluña y una consulta en el País Vasco. Este es el precio acordado. Ese es el precio que van a pagar».
Ha advertido que, ante este panorama, «lo que hemos conocido como la Transición española, la Constitución española, la integridad de España, va a saltar por los aires. No hay ningún Gobierno en el mundo que esté apoyado por partidos y fuerzas que quieran destruir, no solo el Gobierno, sino el Estado y el país por el que trabaja ese Gobierno actualmente», ha criticado.
Frente a ello, Aznar ha propuesto al PP como partido histórico, constitucional, centrado y moderado. Ha concluido pidiendo «una gran mayoría para Alberto Núñez Feijóo, para la España solidaria y par ala España constitucional».