La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, ha obtenido este martes una importante victoria en el Parlamento al derrotar una enmienda laborista que habría obligado al Gobierno a solicitar a la UE un aplazamiento del Brexit, previsto para el 29 de marzo, si se llegaba al 26 de febrero sin que los diputados británicos apoyaran el Tratado de Retirada.
La bautizada por la prensa local como 'enmienda Cooper' por su coautora, la legisladora laborista Yvette Cooper, aunque también está firmada por el 'tory' Nick Boles, ha sido rechazada por 321 votos en contra y 298 a favor, según ha informado BBC.
Los miembros de la Cámara de los Comunes se han pronunciado este martes sobre una serie de enmiendas que buscan reconducir la 'hoja de ruta' fijada por el Gobierno de May para el Brexit.
Además de la 'enmienda Cooper', que planteaba el mayor desafío para Downing Street, los legisladores británicos han rechazado otra propuesta laborista que obligaba al Gobierno a descartar un Brexit sin acuerdo y reclamaba «una unión aduanera permanente» con la UE.
Una enmienda similar planteada por el Partido Nacionalista Escocés (SNP), que reivindicaba el 'no' de Escocia y Gales al Brexit y exigía a May que descartara un divorcio caótico y solicitara una prórroga de los plazos.
Sin embargo, la enmienda lanzada por los diputados Caroline Spelman (laborista) y Jack Dromey (conservador), que ha recabado el mayor número de firmas entre los parlamentarios y rechaza igualmente un Brexit sin acuerdo, ha sido aprobada por 318 votos a favor y 310 en contra.
La llamada 'enmienda Spelman' «rechaza que Reino Unido deje la Unión Europea sin un Tratado de Retirada y un Marco para las Relaciones Futuras» entre Londres y Bruselas, si bien no especifica cómo obligará al Gobierno a cumplir su contenido.