Un grupo de investigadores de la Universidad de Aix-Marsella ha detectado una nueva variante de coronavirus en Francia a la que han denominado IHU, con 46 mutaciones y 37 deleciones. El origen de esta nueva cepa se encuentra en Camerún, donde se contagió su paciente cero, según ha publicado este lunes la revista Redacción Médica.
El estudio ha surgido tras detectar en el sur de Francia, en el área de Marsella, doce casos de contagios de la nueva cepa. Todos ellos viene en la ciudad de Forcalquier, a unos 100 kilómetros de la segunda ciudad más poblada del país. Los resultados preliminares han sido publicado en la plataforma medRxiv y señalan que al hacer las PCR a los infectados, se detectaron mutaciones que mostraron una combinación atípica. «Estos datos son otro ejemplo de la imprevisibilidad de la aparición de variantes del SARS-CoV-2 y de su introducción en un área geográfica determinada desde el extranjero», explican los autores del estudio.
El análisis de estos pacientes reveló 46 mutaciones y 37 deleciones que dieron como resultado 30 sustituciones de aminoácidos y 12 deleciones. Catorce sustituciones de aminoácidos, incluidos N501Y y E484K, y 9 deleciones se encuentran en la proteína de pico, según el informe.
Por el momento no hay estudios suficientes de cómo se va a comportar la nueva variante. Los investigadores señalan a que todavía es pronto para saber si va a ser más trasmisible o letal, según explica Le Figaro. Al ser detectadas las variantes los expertos las clasifican en tres grupos: variante preocupante (como ómicron o delta), variante de interés (como lambda o mu), o variante bajo vigilancia (como la variante bretona). Por ahora, la IHU no ha sido clasificada.