El presidente de Francia, Emmanuel Macron, nombró este lunes como nueva primera ministra a la titular de Trabajo Élisabeth Borne, quien procede de la órbita socialista y es la segunda mujer en ocupar el segundo cargo más importante de Francia. Borne -que también encabezó los ministerios de Ecología y de Transportes durante el primer mandato de Macron (2017-2022)- sustituye al conservador Jean Castex, quien, como se esperaba, este lunes formalizó su dimisión como primer ministro de Francia después de casi dos años en el cargo.
Macron, quien renovó su cargo el pasado abril venciendo a la ultraderechista Marine Le Pen con un margen menos amplio que en 2017, escogió a Borne, de 61 años, para dotar a la jefatura del Gobierno de un perfil más social y ecologista. Borne será la segunda primera ministra de la historia de Francia, después del fugaz paso de Edith Cresson, quien estuvo en Matignon solo once meses (de mayo de 1991 a abril de 1992), durante el segundo mandato del socialista François Mitterrand. El traspaso de poderes entre Castex y Borne se producirá casi inmediatamente. Macron ha agradecido en un mensaje a Castex su labor estos últimos 22 meses: «Ha actuado con pasión y compromiso al servicio de Francia. Estemos orgullosos del trabajo logrado y de los resultados logrados juntos».
El presidente francés se decidió por Borne en detrimento de otras posibles candidatas como Catherine Vautrin, antigua secretaria de Estado en el mandato de Nicolas Sarkozy y que perdió fuelle por sus posiciones vistas como demasiado conservadoras. Unos días después de vencer en las elecciones, Macron había dicho públicamente que su nuevo primer ministro debía estar comprometido a «las cuestiones sociales, medioambientales y productivas». Así, Borne, de un perfil más técnico que político, subió enteros en las quinielas tanto por su reciente experiencia en el Gobierno -además de ministra de Trabajo y de Ecología lo fue de Transportes-, como por su labor durante el quinquenio socialista de François Hollande (2012-2017).
En ese tiempo, fue nombrada prefecta (delegada del Gobierno) de los departamentos de la Vienne y de Poitou-Charentes. En 2014, fue jefa de Gabinete de la entonces ministra de Ecología, la candidata presidencial de 2007 Ségolène Royal. Macron ha nombrado a la nueva inquilina de Matignon confiando en un triunfo electoral de su nueva coalición «Ensemble» («Juntos») en las legislativas de mediados de junio. No obstante, la jefatura del Gobierno depende de la confianza del Parlamento por lo que, en el caso improbable de que «Ensemble» no gane en junio, su puesto estaría en riesgo.