La medalla del Premio Nobel de la Paz con la que fue galardonado en 2021 Dimitri Muratov ha sido subastada este lunes por 103,5 millones de dólares (cerca de 98,2 millones de euros), después de que el periodista ruso anunciara que donaría el premio para ayudar a los refugiados ucranianos tras el inicio de la invasión del Ejército de Rusia. La subasta ha sido llevada a cabo por Heritage Auctions, con sede en Estados Unidos, y ha sido retransmitida en directo por el diario ruso 'Novaya Gazeta', fundado por el periodista y considerado uno de los principales medios opositores dentro de Rusia. Los fondos obtenidos en la subasta irán destinados a la respuesta humanitaria del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en Ucrania.
Por ahora no ha trascendido quién es el comprador, si bien se ha confirmado que la cifra es récord para la subasta de un Premio Nobel. «Muratov, con el apoyo total del personal de 'Novaya Gazeta', nos permite poner a subasta esta medalla no sólo como un objeto, sino como un acto que espera que impacte positivamente sobre las vidas de millones de refugiados ucranianos», ha dicho Heritage Auctions, según ha recogido la agencia alemana de noticias DPA. Asimismo, la casa de subastas ha indicado que el Comité Noruego del Nobel ha respaldado la subasta. «Este acto generoso de humanitarismo va muy en línea con el espíritu de Alfred Nobel», ha resaltado el director del comité, Olav Njolstad, en una carta para confirmar la aprobación del organismo. Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha respaldado la decisión de Muratov. «Mucha gente ayuda a los refugiados de Ucrania que llegan a territorio ruso», ha dicho, antes de defender que «personas de corazón abierto entreguen toda la ayuda posible».
«Toda contribución en este caso, especialmente cuando se trata de niños, sólo puede ser aplaudida», ha resaltado Peskov, tal y como ha informado la agencia rusa de noticias Interfax. «Después de todo, estamos hablando de mucha gente y un único impulso popular», ha manifestado. Muratov, que fundó el diario en 1993, tras la caída de la Unión Soviética, fue atacado en abril con pintura roja cuando iba en tren en Rusia. El asaltante gritó: 'Muratov, esto es por nuestros chicos', en aparente referencia a los militares implicados en la ofensiva en Ucrania. El periodista fue galardonado en 2021 junto a la también periodista filipina Maria Ressa por sus esfuerzos para salvaguardar la libertad de expresión y el periodismo independiente y, por extensión, la democracia y la paz.