El presidente del Consejo de Ministros de Perú, Aníbal Torres, puso su cargo a disposición del mandatario peruano, Pedro Castillo, por «razones personales» y tras considerar que ha servido al «pueblo más postergado y olvidado», en una carta difundida este miércoles por sus redes sociales. Torres se incorporó al Ejecutivo como ministro de Justicia el año pasado y posteriormente asumió el cargo de jefe del gabinete el 8 de febrero, tiempo durante el cual el Gobierno ha acumulado cerca de 60 ministros en las distintas carteras por los continuos cambios en el gabinete.
En su carta dirigida al jefe de Estado, Torres agradeció a Castillo la confianza depositada en él, primero como ministro de Justicia y, luego, como presidente del Consejo de Ministros, el cuarto en un año de gestión del mandatario. Asimismo, anticipó que retornará a su labor como catedrático y le deseó al presidente «el mejor de los éxitos en su gestión». Con la salida del premier, todos los integrantes del gabinete deben presentar su renuncia a Castillo, quien estará en posición de hacer todas las modificaciones que considere pertinentes en el Ejecutivo.
La renuncia de Torres se produce en un momento de particular debilidad del mandatario, que está siendo investigado por la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, por cinco casos de presunta corrupción por, supuestamente, liderar una organización criminal en el interior del Ejecutivo, entre otros cargos. Al menos dos de los principales implicados en esos casos, el exministro de Transportes Juan Silva y el sobrino del mandatario Fray Vásquez, están prófugos de la Justicia y la Policía Nacional ha puesto una recompensa para lograr su ubicación y captura.