La Justicia militar rusa ha incoado el primer caso penal contra un reservista que se negó a combatir en Ucrania, según informó el abogado de derechos humanos Pável Chíkov. «Yo ni voy a ninguna Ucrania, ni pienso disparar contra ningún ucraniano», replicó el acusado al comandante, según explica el activista en su canal de Telegram.
Se trata de un ciudadano de la región siberiana de Yakutia y los hechos tuvieron lugar en un cuartel en Ulán-Udé, capital de la región de Buriatia. Seguidamente, según su testimonio, los oficiales de la unidad le amenazaron con represalias y la apertura de un expediente, por lo que se dio a la fuga. El fugado, un sargento, fue movilizado el 23 de septiembre y fue excluido de su unidad cinco días más tarde.
El reservista, que había sido llamado a filas en el marco de la movilización parcial decretada por el presidente, Vladímir Putin, podría ser condenado a varios años de cárcel. Cientos de miles de rusos en edad militar han abandonado en las últimas semanas el país por temor a ser enviados al frente en Ucrania. Además, muchos movilizados y voluntarios han denunciado la falta de equipos, las malas condiciones de manutención y la ausencia de instrucción militar.