Las autoridades ucranianas estiman en 27.000 el número de civiles ucranianos hechos prisioneros por Rusia en los territorios ocupados o en la propia Federación Rusa, anunció este miércoles el Defensor del Pueblo de Ucrania, Dmytró Lubinets. «Según nuestros datos, la Federación Rusa mantiene detenidos a más de 27.000 rehenes civiles», dijo Lubinets, citado por la agencia nacional de noticias ucraniana, Ukrinform.
A principios del mes de mayo, Ucrania estimaba en unos 20.000 el número de sus civiles detenidos por Rusia. Lubinets acusó a Bielorrusia de participar en la deportación a Rusia de prisioneros de guerra, niños y civiles adultos ucranianos detenidos por las fuerzas de Moscú en los territorios ocupados de Ucrania.
«Tenemos confirmación de que niños, rehenes civiles y prisioneros de guerra ucranianos fueron trasladados por la fuerza a través del territorio de Bielorrusia con la implicación directa de las autoridades bielorrusas», explicó Lubinets. Ucrania ha denunciado desde el comienzo de la guerra las detenciones masivas en los territorios ocupados por Rusia de civiles a los que las autoridades impuestas por Moscú acusan de terrorismo, espionaje, colaboración con las fuerzas ucranianas o conspiración contra el ejército ruso.
Asimismo, el jefe del grupo de mercenarios rusos Wagner, Yevgueni Prigozhin, pidió al Comité de Instrucción y a la Fiscalía de Rusia que investiguen posibles delitos de altos funcionarios del Ministerio ruso de Defensa durante la campaña militar en Ucrania.
«Hoy solicité al Comité de Instrucción y la Fiscalía de Rusia que investiguen la comisión de delitos durante los preparativos y la marcha de la operación militar especial por parte de altos funcionarios del Ministerio de Defensa de Rusia», afirmó en un mensaje publicado en Telegram. Prigozhin añadió que no publicará el contenido de sus solicitudes, «ya que se trata de algo de lo cual se ocuparán los órganos de investigación».
El jefe de Wagner ha criticado en reiteradas ocasiones al Ministerio de Defensa de Rusia y al Estado Mayor del Ejército ruso, al acusar directamente al ministro Serguéi Shoigú y a Valeri Guerásimov, jefe del mando militar ruso, de no suministrar armamento suficiente y entregar territorios anteriormente tomados. Prigozhin había alertado de que tenía la lista con todos los nombres de los implicados en los presuntos delitos, a los que acusó directamente de traición y responsabilizó del gran número de bajas del Grupo Wagner en Bajmut a consecuencia de falta de municiones que sufría esta unidad paramilitar.