El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, continuará un año más al frente de la organización militar a petición de los aliados, una decisión que se hará oficial de cara a la cumbre de Vilna en julio, han confirmado varias fuentes aliadas a Europa Press. En medio de las dudas en el seno de la OTAN por la falta de un candidato claro, lo que abriría un cónclave incierto en un contexto de guerra, los 31 aliados han decidido prorrogar otra vez el mandato del ex primer ministro noruego que seguirá en su puesto hasta el verano que viene. «Formalmente no está acordado pero el actual secretario general continuará», ha explicado una de las fuentes consultadas.
El mandato de Stoltenberg expiraba inicialmente en octubre de 2022, pero la invasión rusa de Ucrania llevó a los líderes aliados a pedirle que siguiera un año más antes de la cumbre de Madrid y ahora vuelven a acordar este paso que en el seno de la OTAN ven como imperfecto pero necesario. Stoltenberg lleva semanas señalando que no busca extender su mandato, tras ser elegido en 2014 y aceptar dos ampliaciones, pero también reconocía que su futuro estaba en manos de los aliados. Hace semanas, fuentes de la OTAN explicaron a Europa Press que el escenario más probable, dada esta coyuntura, era prorrogar el mandato de Stoltenberg antes que llegar a un acuerdo para su sustituto y entendían que su en el cargo «no dependía solo de sus intenciones».
Ahora el ex primer ministro noruego seguirá en el puesto hasta la cumbre de líderes prevista en Estados Unidos el año que viene, coincidiendo con el 75 aniversario de la fundación de la alianza atlántica, una maniobra con la que la OTAN ganará tiempo para pensar en nuevos candidatos y encauzar mejor el debate. Los aliados llevan meses con el debate de la sucesión encima de la mesa, que comenzó en un primer momento con el objetivo de elegir por primera vez a una mujer como jefa de la organización militar.
En este sentido, han sonado con fuerza el nombre de la primera ministra estonia, Kaja Kallas, y el de la primera ministra danesa, Mette Frederiksen. El nombre del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también ha aparecido en las quinielas al encarnar una candidatura del sur de Europa, después de dos secretarios generales seguidos procedentes de Escandinavia. Junto a Sánchez, en la OTAN veían con buenos ojos la opción del primer ministro neerlandés, Mark Rutte, o el presidente rumano, Klaus Iohannis.