El número de fallecidos en Israel por el ataque sorpresa del sábado del movimiento islamista Hamás superó este miércoles los 1.200 y los heridos superan los 2.900, mientras continúa el intercambio de fuego con las milicias de la Franja de Gaza.
Esta cifra de fallecidos, difundida por medios locales citando a los servicios de emergencias médicas, marca un importante aumento respecto al último informe, que había confirmado alrededor de 900 muertos.
Del lado gazatí, el Ministerio de Sanidad palestino registra hasta el momento al menos 900 muertos por los bombardeos israelíes de represalia y más de 4.500 heridos.